La CNMC pide mayor regulación sobre los grupos de presión en España

El presidente de la Comisión Nacional de los Mercados y de la Competencia (CNMC), José María Marín, ha reclamado "una regulación más extensa y no tan corta como la actual sobre los lobbys". En su opinión, tener más conocimiento de estos grupos de presión "ayudaría a todos", incluso a los propios lobbys, "que tienen intereses lícitos en defensa de las empresas". No obstante, ha añadido, "con una regulación más proporcional se evitarían confusiones como las de las que pueden tener asociaciones empresariales con organismos públicos, que pueden tener relaciones menos claras". "La sociedad debe conocer sus características", ha defendido.

En relación al expediente abierto a Iberdrola, Marín Quemada no ha querido dar más explicaciones "por razones de seguridad jurídica". Solo ha aclarado que se estudian "comportamientos irregulares en los precios de la subasta de principios de diciembre".

El presidente de la CNMC ha exigido que su organismo goce de "rigor, independencia y transparencia, porque sin estas características, dudo de que sirva para algo. Lo debemos tener cada día". También ha abogado por la lucha contra los carteles, "que son los que más perjudican al consumidor y a las empresas no cartelizadas". "La CNMC no debe ser ni un bunker ni vivir en una burbuja y escuchar a unos y otros", apuntó.

También ha llamado este viernes a alcanzar una "reflexionar" antes de adoptar cualquier decisión sobre el conflicto abierto entre el colectivo del taxi y la aplicación móvil de transporte Uber, y ha alertado de que la prohibición de esta última es una "herramienta excesivamente fácil". Así lo ha indicado durante la jornada final del seminario La Europa que deja la crisis, organizado por la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP) en colaboración con la Asociación de Periodistas de Información Económica (APIE), y patrocinado por BBVA.

"Desde la CNMC nos preocupa mucho que lo que se haga se haga bien y estamos deseando el Gobierno no pregunte para con nuestra opinión orientar las iniciativas normativas (que correspondan)", ha dicho.A su juicio, "es un tema complejo de ordenar y de regular". "Tenemos una idea clara de que hay que reflexionar deprisa sobre ello y que las respuestas deben ser proporcionales al problema", ha añadido para apostillar que "prohibir es una herramienta excesivamente fácil" y que requiere "especial cuidado".