Rajoy aboga por una reforma fiscal que estimule el ahorro y ayude a las familias

El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha anunciado este miércoles que la reforma fiscal que entrará en vigor en enero de 2015 favorecerá a las familias, estimulará el ahorro y promoverá la contratación y la competitividad. "Ahora toca" favorecer a los hogares, ha asegurado tras admitir: que ya ha subido "muchos impuestos". "Pero es que nadie se encontró el país en la situación que me lo encontré yo", se ha justificado.

"Esa nueva ley entrará en vigor el 1 de enero de 2015 y comenzará la bajada de impuestos, que era, efectivamente, aquello a lo que yo me había comprometido con los españoles", ha reconocido. Sin embargo, se desconoce si este eventual recorte supondrá volver a los niveles previos a su llegada al poder y a su primera decisión tras tomar las riendas del Ejecutivo, que fue la de subir el IRPF. En esencia, la reforma tributaria apunta a una rebaja de la fiscalidad sobre el trabajo y un aumento de la tributación sobre el consumo y de la propiedad inmobiliaria a costa de ampliar las bases imponibles ya que las cuentas públicas siguen necesitadas de aumentar la recaudación.

"Coincido con usted en que ahora toca proceder a la bajada impuestos", le ha dicho al portavoz adjunto de CiU en el Congreso, Josep Sánchez Llibre, en la sesión de control, donde ha vuelto a justificar las subidas que hizo del IVA e IRPF en la difícil situación en la que encontró al país cuando llegó al Gobierno, aunque también evitó —ha dicho— las presiones para elevar los tipos de la hostelería.

Rajoy ha explicado que la mejora de competitividad de la nueva reforma irá "en la línea de lo que hemos hecho en la ley de emprendedores", donde hay una tributación de Sociedades de nueva creación a tipo reducido del 15 %, reducción del 20 % en los rendimientos netos para autónomos que inicien actividades económicas, exención completa para los autónomos en el IRPF por las prestaciones por desempleo, y otras similares.

Por otra parte, Rajoy ha asegurado que el Ejecutivo ya ha hecho "lo que tenía que hacer" para reestructurar el sistema financiero español, incluso pidiendo un crédito a la Unión Europea, que "pronto podremos empezar a recuperar".