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Reportaje:

Lujos cada vez más caros

Según Forbes, a los multimillonarios norteamericanos les ha subido su exclusiva cesta de la compra un 6%

Durante el último año, a los multimillonarios norteamericanos les ha subido la cesta de la compra de su vida de lujo un 6%, más del doble que el IPC del ciudadano corriente, según pública la revista de negocios Forbes. La publicación saca sus cálculos en función del Indice del Coste de Vivir Extremadamente Bien ("Cost of Living Extremely Well Index"), una pormenorizada cesta de la compra para los muy ricos que mide la evolución del precio de artículos tan prescindibles como el caviar del Caspio, el Dom Perignon, los jet privados o los palcos para la ópera en el Metropolitan de Nueva York.

De acuerdo con dicho índice, que dispone de datos desde 1976 sobre una cuarentena de estos lujos, a los muy ricos no les cabe el consuelo de pensar que en el último año han pasado por una mala racha. En toda la última treintena han sufrido una inflación acumulada del 672%, lo que dobla de largo el IPC ordinario en Estados Unidos, el 265%.

A estos multimillonarios, y a sus semejantes de parecida vida cosmopolita y consumo ostensoso en otros países, les habrá inquietado comprobar que una caja de Dom Perignon ha subido un 8% entre 2006 y 2007, y se paga ahora a 1.679 dólares (unos 1.225 euros), que el kilo de caviar del Caspio está a 9.800 dólares (7.150 euros) y que un par de zapatos Gucci auténticos se va a 445 dólares (casi 330 euros), un 9% más que el año pasado.

Ya casi no merece la pena comprarse un jet privado (seis millones de euros un Learjet 40XR de siete pasajeros) para viajar a París a cenar en la "Tour d'Argent" (320 euros por persona incluido vino y propina).

Rolls Royce, Harvard, un 'lifting'

Sale más a cuenta pagarse un Rolls Royce Phantom (menos de 250.000 euros) para, en compañía de una bella mujer envuelta en un abrigo ruso de marca (164.000 euros), dejarse caer por un palco de abono en el Metropolitan de Nueva York (4.200 euros dos asientos para ocho representaciones en sábado noche).

No hay que olvidar, tampoco, que preparar a los hijos para que en su día emulen a sus padres exige una educación selecta en un lugar como Harvard (33.300 euros al año todo incluido) y que dar un simple toque de distinción a la ornamentación del hogar con un par de escopetas de época James Purdey&Sons se pone en 143.000 euros.

Además, hacerse un lifting en los mejores cirujanos plásticos cuesta más de 12.400 euros, un 17% más que en 2006, y menos mal que un buen psiquiatra neoyorquino sigue aplicando este año la misma tarifa que el pasado, 220 euros la sesión de 45 minutos.

Quienes no necesiten psiquiatra y lleven esta vida con buena conciencia podrán disfrutar de su ejemplar de Forbes, uno de los pocos artículos no inflacionistas en el Indice del Coste de Vivir Extremadamente Bien, y que sigue costando unos módicos 60 dólares (unos 44 euros) por un año de suscripción.

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