Contradicciones taurinas

La hipocresía de algunos políticos catalanes se muestra más que evidente al atribuir la prohibición de las corridas a la defensa de los derechos de los animales... al mismo tiempo que deciden su apoyo a los festejos en los que se martiriza a los toros, sin más normas que la de divertirse con su angustia y sin darles la oportunidad de defenderse, como ocurre en la lidia. La razón que aducen ante esa contradicción es que en los correbous no se mata al toro. Es como defender la abolición de la pena de muerte en el Código Penal... pero permitir que el reo quede a merced del pueblo para colocarle en la cabeza unas antorchas y someterle a toda clase de vejaciones hasta lograr que enloquezca. Hay argumentos para todos.

Los Verdes de Andalucía se han propuesto prohibir, igual que en Cataluña, las corridas de toros. Este partido ecologista, arguye que su propuesta, nada tiene que ver con "el tema identitario", sino que es "una cuestión entre barbarie y civilización". Para esta propuesta prohibicionista, Los Verdes, están recogiendo firmas.

No sé qué entenderán los ecologistas por barbarie y civilización. Desde luego, si nos atenemos a las bases del ideario de muchas organizaciones ecologistas, habría que decir que sus deseos de volver a estar en armonía con la naturaleza (para qué hablar sobre los derechos de los animales), esto es, al deseo de retroceder en el tiempo a estadios menos civilizados, encontraríamos en sus tesis contradicciones flagrantes. Entraría el discurso de Los Verdes en contradicción, por ejemplo, con el florecimiento de la cultura, y, por ende, de la civilización, propiciado por la fiesta en Andalucía. Para qué citar el cante y baile flamencos; para que citar a García Lorca, a Alberti, a Picasso, etcétera, tan universales todos. Y otra cosa, esto del prohibicionismo qué es, ¿barbarie o civilización?