El temporal ahoga a los pescadores

La lluvia no sólo ha anegado los campos. También ha ahogado la ya maltrecha economía del sector pesquero. Aunque la vuelta del sol, a finales de esta semana, ha permitido a los marineros recuperar su faena, el temporal de los últimos meses ha causado una media de inactividad de 45 días, según los cálculos de la Federación Andaluza de Cofradías.

Algunas semanas enteras no ha podido salir ninguno de los principales barcos locales, lo que ha provocado una reducción de un 10% de venta en las lonjas. Muchas pescaderías han tenido que surtirse en mayor medida de pescado procedentes de otros países, principalmente Italia y Marruecos.

Las 13 cofradías andaluzas se reunieron el 10 de marzo para hacer un análisis de los daños y reclamar ayudas. El mes no había comenzado bien para ellos. El último Consejo de Ministros de febrero había aprobado ayudas para todos los sectores, pero no para las flotas pesqueras. Posteriormente las autoridades han corregido ese olvido. El propio presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, incluyó explícitamente a los pescadores en su listado público de los principales damnificados en Andalucía por las lluvias tras reunirse con el titular de la Junta, José Antonio Griñán.

Los cálculos expuestos en la reunión de cofradías han servido para cifrar en 45 días la inactividad debida al temporal, un período similar a las paradas biológicas anuales que se establecen para cada sector. La Federación Andaluza cree que deben llegar ayudas extraordinarias para paliar esta falta de trabajo y, por tanto, de beneficios. Una propuesta es dar a cada flota el mismo dinero que perciben por parada biológica. Aunque de la reunión del 10 de marzo en Algeciras también salieron otras propuesta, como el establecimiento de bonificaciones en las cuotas de la Seguridad Social o la exención de los pagos de los cánones de las lonjas, las fábricas de hielo o los locales para armadores. También se van a solicitar líneas de préstamos del Instituto Oficial de Crédito para los empresarios pesqueros.

La lluvia y el viento han dejado sin faena a pescadores de toda Andalucía, desde Huelva hasta Almería, y han afectado a todas las especies. Sólo en el Golfo de Cádiz las pérdidas se calculan en 25 millones. A ese dinero hay que añadir los daños que se han producido en infraestructuras portuarias, que también son numerosos aunque todavía no se han terminado de cuantificar. El ejemplo más claro está en Conil donde el regreso a la faena ha puesto en evidencia las peligrosas condiciones en las que ha quedado su puerto. La acumulación de arena en la bocana del muelle, que ha traído el viento, propicia que se puedan producir accidentes. El Ayuntamiento de Conil y la cofradía de pescadores de esta localidad ya han solicitado a la Agencia Pública de Puertos de Andalucía un dragado urgente. Otra inversión necesaria para paliar los desastres del temporal.