La tensión laboral se eleva en Vigo con varios encierros

Las protestas laborales se multiplican en Vigo con métodos de impacto inmediato. Los cuatro trabajadores de la empresa de contenedores Termavi encerrados en dos grúas del muelle amenazaron ayer con no permitir que "nadie" los desaloje mientras la dirección no acceda a negociar. Ésta exigió que abandonen la acción que impide que se cumplan los servicios mínimos, ya que sólo una grúa se mantiene operativa para la descarga de buques mercantes. A 36 metros del suelo, los trabajadores recibieron ayer agua, sacos de dormir y material de higiene que les proporcionaron sus compañeros, pero mantienen la huelga de hambre que iniciaron en la madrugada del jueves.

Pese a la actitud inicial de Termavi, su consejero delegado, Baltasar de Diego, les anunció ayer que no impedirá que se les proporcione lo básico (la cabina de una de las grúas tiene un suelo de reja metálica abierto al exterior). Por la mañana, el resto de la plantilla protagonizó un encierro en la Delegación de Traballo y arrancó el compromiso de que el lunes estará listo el informe sobre los incumplimientos que los trabajadores han denunciado.

Los encerrados en las grúas dicen que "nadie" les forzará a bajar

El sindicato CIG aseguró que Botamavi (también vinculada al Puerto), iniciará el día 30 otro paro en solidaridad con Termavi. Tres buques tuvieron que desviarse a otros puertos el jueves y otros cinco ayer a causa de la protesta. Corina Porro, presidenta de la Autoridad Portuaria, denunció que no se cumplen los servicios mínimos por "irresponsabilidad", de los sindicatos.

A primera hora de la tarde otra empresa en conflicto anunciaba medidas drásticas. Los trabajadores de la conservera Bernardo Alfageme se aprovisionaron de alimentos y colchones durante el día para encerrarse en la fábrica a partir de las nueve de la noche en protesta porque no han cobrado su salario de noviembre ni la paga de Navidad.

La conservera apremia a la Xunta para que confirme el apoyo económico que comprometió hace unas semanas y le informe "sin más dilación" sobre el aval de nueve millones que necesita. Alfageme ha solicitado a dos entidades financieras un crédito puente de dos millones de euros mientras no se concreta el aval del Igape.