Prenafeta sale de la cárcel tras reunir un millón de euros "de familiares y amigos"

Lluís Prenafeta, que fue secretario general de la Presidencia durante más de una década con Jordi Pujol, abandonó ayer la cárcel de Brians 2 tras pagar la fianza de un millón de euros que le impuso el pasado lunes el juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón por el caso Pretoria, ligada a la corrupción urbanística.

En menos de 24 horas, el ex alto cargo de la Generalitat logró reunir el dinero, aunque le costó un poco más que al ex consejero de Economía Macià Alavedra, quien abandonó el centro penitenciario el lunes por la noche tras reunir otro millón de euros en menos de ocho horas.

Marc Prenafeta, uno de los hijos del imputado, explicó que el dinero de la fianza de su padre procedía de la "colaboración de familiares y amigos". Incluso aseguró que algunos desconocidos se habían ofrecido a la familia para ayudarles. "Es una cantidad muy elevada. Estamos haciendo lo que podemos para reunirla", explicó el lunes por la tarde a las puertas de la cárcel.

Comparten abogado, se les imputan los mismos delitos y sus esposas están acusadas

Se fue con las manos vacías, pero ayer regresó visiblemente más tranquilo. Pese a ser día festivo, Prenafeta pudo salir de prisión porque esta semana Garzón está de guardia en la Audiencia Nacional. El juez razona en el auto de libertad, idéntico para ambos, que, si bien no está "totalmente asegurado" que no intentarán hacer desaparecer datos de la investigación o adoptar otras medidas, ya se ha cumplido la función que perseguía la prisión preventiva. A su juicio, la Guardia Civil podrá analizar la documentación intervenida, y se han cumplimentado las comisiones rogatorias a varios países en los que los acusados podrían esconder capitales.

Prenafeta dejó la cárcel a las 14.30 horas, tranquilo, sonriente y con buen aspecto, frente al semblante compungido de Alavedra de la noche anterior. A la salida le esperaban sus hijos Jordi y Marc. Éste explicó que su padre se encuentra en buen estado de salud y que a partir de ahora trabajará para "demostrar su inocencia".

Prenafeta y Alavedra, de 70 y 75 años respectivamente, comparten abogado, por lo que ambos conocieron al mismo tiempo la necesidad de reunir el dinero para abandonar cuanto antes el centro Brians 2, la cárcel más moderna que funciona en Cataluña, inaugurada hace poco más de dos años en Sant Esteve Sesrovires (Baix Llobregat). El defensor de ambos imputados es Juan Córdoba Roda, que ejerce desde hace 52 años y que en su día fue abogado de Jordi Pujol en el caso Banca Catalana.

Los dos ex altos cargos de Pujol fueron detenidos el pasado 27 de octubre por orden de Garzón junto con siete personas más. Tres días después ingresaron en la cárcel de Soto del Real (Madrid), y el pasado 25 de noviembre llegaron a Brians 2. Garzón les imputa los mismos delitos (asociación ilícita, blanqueo de capitales y tráfico de influencias), supuestamente cometidos al participar -y cobrar comisiones ilegales por ello- en varias operaciones urbanísticas en Santa Coloma de Gramenet y Badalona. Otra característica común es que en la causa están imputadas sus esposas, Maria Lluïsa Mas y Doris Malfeito, quienes prestaron declaración el pasado día 3.

Con la excarcelación de Prenafeta y Alavedra, ya sólo quedan en prisión Bartomeu Muñoz, ex alcalde de Santa Coloma de Gramenet, suspendido de militancia por el PSC, y el empresario Luis García Sáez, Luigi.