La caja gana 1.410 millones de euros hasta septiembre

Los resultados de La Caixa en los primeros nueve meses del año, difundidos ayer, ascendieron a 1.410 millones de euros, cifra que supone un retroceso del 10,2%. El margen de intereses, que mide la actividad típicamente bancaria, progresó un 10,2% y el margen de explotación se elevó un 15,1%, hasta los 2.847 millones.

Tres factores han condicionado el resultado de este tercer trimestre: por una parte, el refuerzo del colchón de dotaciones para insolvencias, que de septiembre de 2008 a septiembre de 2009 se duplicaron y al que se destinaron los 249 millones de euros obtenidos en plusvalías por la venta de un 1% de Telefónica en el trimestre anterior.

Otro punto fuerte ha sido la actividad comercial, que se ha traducido en un incremento del 2% de los recursos de clientes y en una subida del 1,6% en el caso de la inversión en créditos. Y, finalmente, el control de la morosidad, que sólo ha subido una décima desde el pasado 31 de marzo. Los créditos morosos representan un 3,53%. La media del sector hasta agosto era, en el caso de las cajas, del 5,34% y, en el de los bancos, del 4,41%. La cobertura de los dudosos se mantiene en el 60%, o en el 127% si se incluyen las garantías hipotecarias. La caja sólo ofrece datos anuales sobre los activos inmobiliarios que se ha adjudicado por la imposibilidad de pagar la hipoteca por parte de sus dueños, de modo que hasta enero no será posible saber el impacto de esas adjudicaciones en el control de la morosidad.

La entidad, que preside Isidre Fainé y dirige Juan María Nin, destacó su fortaleza y solidez financiera, traducida en un core capital (el indicador clave de la solvencia) del 8,9%, "el más elevado entre los competidores directos".