El gobierno de Sevilla estudia blindar a sus empresas contra la privatización

Las juntas generales de las cinco empresas municipales de Sevilla tienen previsto pronunciarse hoy sobre su integración en una única sociedad mercantil. La idea, que ya funciona en ciudades como Barcelona o Roma, es constituir en los próximos meses la Sociedad Corporación Pública DeSevilla, a la que el Ayuntamiento cedería su participación en las empresas públicas de transportes (Tussam), limpieza (Lipasam), vivienda (Emvisesa), agua (Emasesa) y la televisión municipal (DeSevilla Digital Uno Televisión).

Las cuatro primeras ya se constituyeron en 2004 en una Agrupación de Interés Económico (AIE) para optimizar algunos recursos y desarrollar proyectos corporativos. Pero, según un documento elaborado por sus responsables, la AIE tiene algunas "limitaciones funcionales" debido a su dependencia "orgánica y funcional" de las empresas municipales. En cambio, la nueva corporación pública actuaría como cabecera de grupo, lo que le permitiría controlar directamente a las empresas municipales.

Según el documento que sienta las bases de la propuesta, esta sociedad mercantil, además de prestar servicios de gestión administrativa y financiera a las empresas municipales, serviría para establecer estrategias conjuntas, aprovechar economías de escala y centralizar recursos y criterios financieros. El informe destaca también ventajas fiscales del nuevo modelo, como la posibilidad de aprovechar beneficios como acogerse al régimen de tributación consolidada, lo que permite, por ejemplo, compensar pérdidas de una sociedad con los beneficios en otra.

No privatización

La conversión en sociedad mercantil tendría también ventajas estructurales. Entre otras, aseguraría que cada empresa mantiene su independencia funcional, permitiría distribuir los gastos estructurales entre todas las sociedades, aseguraría la gestión directa de los servicios por parte del Ayuntamiento y, sobre todo, "incrementaría las barreras de entrada a una posible privatización".

Una vez que culmine el proceso, el alcalde presidirá el consejo de administración de la nueva sociedad, que se reunirá una vez al trimestre. Las cinco empresas que formarían parte de esta sociedad son 100% propiedad del Ayuntamiento, excepto Emasesa, en la que Sevilla tienen el 70,98% de las acciones, que serán las que se cederán a la corporación pública. El 29,02% restante seguirá en manos de otros ayuntamientos de la provincia a los que la empresa de agua presta servicio.

Las sociedades municipales tienen 3.950 empleados, 350 millones de euros de ingresos de explotación y 1,2 millones de clientes potenciales.