El jurado declara culpables a los dos acusados del triple asesinato de Castelldefels

El jurado popular declaró ayer por unanimidad culpables a los dos acusados de asesinar a una familia de joyeros en Castelldefels (Baix Llobregat) en noviembre de 2005 en un atraco al establecimiento que regentaban. Murieron acuchillados José Luis Royo; su hijo, Carlos Royo, y la esposa y madre, respectivamente, de los anteriores, Rosa María Alonso.

El jurado declaró a Fernando Sánchez Medina culpable de dos asesinatos con alevosía y ensañamiento y de un asesinato con alevosía, además del intento de atraco, por lo que el fiscal pidió para él 73 años y medio de cárcel en el juicio. A su sobrino, Juan Antonio Sánchez Hernández, el jurado le declaró culpable por unanimidad de tres asesinatos con alevosía, además del intento de atraco, por lo que la fiscalía pidió finalmente para él 63 años de cárcel.

Los dos atracadores penetraron en la joyería Royo y, esgrimiendo un revólver simulado y un machete, amedrentaron a Rosa María Alonso. La mujer se puso a gritar y alertó a su marido e hijo, que se hallaban en un pequeño taller. Cuando bajaron, Fernando Sánchez les asestó varias puñaladas mortales mientras su sobrino les amenazaba con el revólver. La madre también fue apuñalada, pero puedo salir tras los atracadores, momento en que Fernando Sánchez le volvió a asestar un cuchillazo mortal ya en la calle.