Greenaway reactiva las obras maestras del pincel

"El cine está moribundo, pero las pantallas están mejor que nunca". Así lo cree el director británico Peter Greenaway, que desde hace años intenta superar las limitaciones del cine con propuestas interactivas. El 3 de junio Greenaway presenta la tercera instalación multimedia de Nine classic paintings, en la que da vida a nueve obras maestras de la pintura.

El Cenacolo Palladiano de la isla de San Giorgio acogerá la intervención en Las bodas de Caná, de Paolo Veronese. La enorme tela, que representa el primer milagro del Evangelio, cuando Jesús salvó el éxito de una boda convirtiendo el agua en vino, fue enviada por Napoleón en 1797 al Museo del Louvre de París, donde se exhibe frente a La Gioconda. Hace un año la pintura volvió al refectorio del convento benedictino, como una extraordinaria versión facsímil realizada por el estudio Factum Arte de Madrid. Greenaway se encargará de fragmentar, multiplicar y animar esta reproducción.

Las bodas de Caná es la tercera entrega de un atípico diálogo entre pintura, cine y técnicas audiovisuales, iniciado con una instalación que proyectaba diferentes efectos visuales sobre La ronda de noche, de Rembrandt. Luego llegó la intervención sobre La última cena, de Leonardo da Vinci hace poco menos de un año. Los dominicos, que conservan la misteriosa obra en el refectorio del convento de Santa María de las Gracias, la cedieron sólo para una representación.

A diferencia de proyectos anteriores, en Venecia Greenaway usa todo el espacio y no sólo la superficie de la obra, creando un entorno inmersivo, por donde el público deambula libremente, sobre un suelo convertido en espejo o agujero negro, según el momento. La oscuridad del cenáculo contribuye a catapultar a los espectadores en una narración que recorre las fases de uno de los milagros más populares del Evangelio, a través de un sofisticado juego de imágenes, luces, voces, música y sonidos, que parecen surgir de la pintura y las paredes del refectorio, donde se proyectan secuencias animadas de varios detalles del cuadro.

Diálogo entre los convidados

Por primera vez hay diálogos entre el centenar de personajes, desde Jesús y María hasta los sirvientes y anfitriones. "Imaginar los diálogos entre 126 personajes, de los que sólo siete son mujeres, fue muy complicado. Veronese no pintó un banquete hebreico del año 33, sino una fiesta de aristócratas en la Venecia de 1562. Aparecen la reina de Inglaterra, María Tudor, Francisco I de Francia y Carlos V, rey de España. También se reconoce a Tintoretto, Tiziano y al propio Veronese, la figura más luminosa de la pintura: imposible no verle", dice Greenaway.

El artista ha contado con la colaboración del holandés Reiner van Brummelen, estrella de los efectos especiales, y del colectivo italiano Change Performing Arts, responsable tecnológico de todos sus actos multimedia.

Entre las seis pinturas que faltan para completar la serie se encuentra Las Meninas, "la más lograda y sofisticada de todas las pinturas ilusionísticas barrocas" y el Guernica.

GREEENAWAY: www.petergreenaway.info FUNDACIÓN CINI: www.cini.it CHANGE P. A.: www.changeperformingarts.it FACTUM ARTE: www.factum-arte.com