Esto es lo que hay

Pasó el Día D, hay nuevo lehendakari, y las siete plagas de Egipto no se han abatido sobre Euskadi. La vida sigue, implacable con esto de la crisis, y con la tarea de salir con bien de ella y reforzados en nuestro tejido social. La soberbia es mala consejera, por ello no debiera rechazarse jamás una mano tendida, aunque a todas luces es mucho más grave trasladar a la ciudadanía la idea de que tenemos un Gobierno carente de legitimidad.

Parece obvio, pero hay que recordar que los votos son los que son, lo mismo que las mayorías parlamentarias, y en eso las matemáticas son irrefutables. Y el arco parlamentario lo componen quienes aceptan las reglas de juego. Eso es lo que hay. Pero, sobre todo, lo que no hay son ciudadanos de segunda que tengan que pedir permiso para respirar. Nace el nuevo Gobierno vasco bajo el signo de la bestia, que no es otro que la amenaza terrorista directa, importantísimo lastre que no tuvieron Gobiernos anteriores y nueva ocasión de oro para hacer piña y no mirar a otro lado.