El ex novio de Svetlana niega que le vieran a él en el lugar del crimen

Ricardo Navarro, acusado de degollar a la joven rusa Svetlana Orlova tres días después de que ésta rechazara su propuesta de matrimonio en un programa de televisión, declaró ayer en el juicio que en el momento del crimen él estaba en casa de sus padres, con ellos y con un amigo. Por tanto, se declara inocente. Los vecinos que lo vieron en la escena del crimen se ratificaron ayer en que era él. "Verían a alguien parecido a mí, pero yo no fui", contestó Ricardo.

Sus padres han rehusado declarar, pero el amigo al que cita para su coartada dijo que efectivamente lo acompañaba esa tarde y dio algunos detalles. El procesado, que en un matrimonio anterior fue condenado por malos tratos, dijo que cuando murió Svetlana él estaba muy deprimido por la ruptura de la relación y que tomaba medicación.

La primera sesión del juicio, ayer, fue grabada íntegramente para ser difundida por televisión. El fiscal pide para el enjuiciado 16 años de cárcel por maltrato continuado y homicidio. La acusación particular cree que es asesinato, es decir, con premeditación, y eleva la pena a 23 años. Svetlana Orlova, de 30 años y madre de un niño, murió acuchillada a manos supuestamente de Ricardo, el 18 de noviembre de 2007.