Rechaza que se hable de juicio "esperpéntico o circense"

Juan Carlos Benito-Butrón sorprendió ayer con un voto concurrente que él mismo tachó de "poco ortodoxo y técnicamente menos correcto". Se refiere en él a la expectación pública y mediática, "a todas luces exagerada", de una vista en la que por primera vez en la historia se juzgaba penalmente a un lehendakari. Carga contra los que usaron la "estrategia de presión" o "las exaltaciones" extramuros del proceso judicial, clara alusión a la movilización del tripartito con el lehendakari a la cabeza. Y al tiempo que agradece a las partes personadas en la causa su trabajo, manda un mensaje a los que se han despachado con declaraciones que caricaturizan el proceso como "kafkiano, esperpéntico o circense", términos usados por Ibarretxe. Un discurso "que se pauta desde impulsos diferenciados [a los judiciales] y a todas luces estériles". En un auto en el que dedica cinco páginas a aspectos ajenos a la discusión jurídica de fondo, critica también las "malas conductas tendenciosamente explicativas, que pretenden atisbar motivaciones espurias de resoluciones" judiciales. El Gobierno ha sostenido que fue el "impulso político" el que dio oxígeno al caso.

"Los opinadores y tertulianos son protagonistas fuera del proceso", señala

Por otro lado, el magistrado censura la "laguna" normativa existente para formar la Sala Civil y Penal en caso de recusaciones, y pone de relieve la desigual "carga de trabajo" que recae sobre los miembros titulares de ésta y los de la Sala de lo Social, de la que él forma parte.