El juez obliga a repetir la censura en Calvos

La moción de censura celebrada el 10 de junio de 2008 contra el alcalde socialista de Calvos de Randín, donde una multitud abarrotó la casa consistorial e imposibilitó el acceso de los firmantes (cuatro tránsfugas del PP y uno del PSOE), tendrá que repetirse. Un juzgado orensano ha declarado nula la sesión plenaria en la que los socialistas, los únicos asistentes, rechazaron la moción en una tensa jornada que se saldó con varios heridos, un intercambio de denuncias por agresión y con el alcalde, Aquilino Valencia, ratificado en el cargo.

La sentencia señala que se vulneraron los derechos constitucionales de los cinco tránsfugas. Y considera probado que el alcalde sabía que había una multitud en el edificio consistorial y que el secretario le indicó que debía impedir "cualquier acto que perturbe o impida el derecho de los miembros de la corporación a asistir al pleno".

Pese a la recomendación del secretario, el alcalde "no actuó ni comprobó el alcance de la situación, ni comentó nada sobre ella", señala la jueza. Además, reprueba la actuación de las fuerzas de seguridad, a la vista del informe redactado por el notario de Celanova que acudió contratado por los tránsfugas. "Ni la Guardia Civil ni otras autoridades hicieron nada por posibilitar la entrada de los cinco concejales", detalla el auto.

Valencia explicó que el pleno se había celebrado y que los firmantes de la moción "no quisieron llegar a la sala porque vinieron con guardaespaldas, que repartieron leña entre los vecinos, pero no se arriesgaron a entrar porque había mucha gente". Los demandantes acudieron acompañados de 12 personas "de seguridad".