Los muertos en la carretera bajaron en 2008 por quinto año consecutivo

Cinco años seguidos con reducción de la mortalidad, aunque la bajada parece haberse estabilizado. El pasado año hubo 69 fallecidos por accidentes de tráfico en las carreteras interurbanas, uno menos que en 2007, según los datos provisionales del Departamento de Interior. La bajada del 1,4% queda lejos del 18% del ejercicio anterior o la de cerca del 7% alcanzada en 2005 y 2006. En el resto de España, la disminución en 2008 ha rebasado el 20%.

Desde 2004, las víctimas mortales en las carreteras interurbanas han bajado sin cesar y las negras estadísticas de finales de los 90 y principios de esta década han quedado atrás. El pico más alto en los últimos 11 años está en 1999, cuando hubo 182 muertos, mientras que en 2003 totalizaron 172.

Interior destacó ayer que el pasado año hubo una importante disminución en los heridos graves y los accidentes con víctimas, con un 14% y un 12% respectivamente de bajada. Las carreteras con más siniestros mortales fueron, en Álava, la N-1 con siete fallecidos y la A-625, con cinco. En Guipúzcoa, la A-8 registró ocho muertos y la N-1, cinco, mientras que en Vizcaya la N-634 tuvo seis fallecimientos.

El Departamento de Interior valoró ayer que el mantenimiento de la curva descendente de víctimas se debe a los planes estratégicos de seguridad vial que acometen el Gobierno, las diputaciones, ayuntamientos y organismos privados, que han posibilitado 300 actuaciones anuales de vigilancia, mejora de las infraestructuras o concienciación. Ello ha permitido cambios en los hábitos sobre la velocidad y el consumo del alcohol. Pero alerta de los problemas con los atropellos y los accidentes de motos.