Arenas critica los gastos de las cuentas, pese a que aún no se conocen

El PP se apresuró ayer a descalificar de plano el anteproyecto de ley de Presupuestos de la Junta y sus previsiones de gasto, pese a que éstas todavía se desconocen. El vicepresidente económico, José Antonio Griñán, dio ayer a conocer los ingresos de la comunidad para 2009 y tan sólo esbozó que habrá préstamos para las empresas. No dio ningún detalle de las partidas del gasto, más allá de que se priorizará la inversión pública, las políticas de empleo y el gasto social destinados a las familias.

Pese a que el presupuesto rompe la tendencia expansiva de ejercicios anteriores, el presidente del PP, Javier Arenas, lo calificó de "continuista". Y pese a que se desconocen las partidas de gasto concretas aseguró que las cuentas "no responden a las demandas de las familias andaluzas ni de los parados de nuestra tierra". Los presupuestos "recogen cero en austeridad, cero en reformas y cero en rebaja de impuestos", proclamó en un comunicado recogido por la agencia Efe, al tiempo que califico de "engaño" la inclusión de 300 millones de euros por la deuda histórica. En su opinión, el proyecto de presupuesto es el del "paro y la nulidad del Gobierno de [Manuel] Chaves ante la crisis".

Arenas retó al PSOE a que "retrate" su voluntad de cumplir con el Estatuto y apoye la enmienda que presentará el Grupo Popular en el Congreso de los Diputados para consignar 1.500 millones como anticipo de la deuda histórica a completar con otros 1.500 millones el próximo año.

IU vaticina recesión

Izquierda Unida también avanzó su rechazo a las cuentas de la Junta. Su portavoz económico, Pedro Vaquero, no se cree la austeridad de los presupuestos de Andalucía para 2009 y ha calificado de "optimistas" las previsiones de crecimiento de un 1% "porque todo apunta a que se entrará en recesión".

IU reclama al Ejecutivo andaluz que ponga en marcha líneas de austeridad en el gasto corriente de la Administración pública, publicidad, contratación, altos cargos y subcontratación de servicios. Según Vaquero, todas estas propuestas se han "descafeinado" y tan sólo se ha mantenido la congelación de los sueldos de los altos cargos, que la coalición de izquierdas "analizará en detalle". La federación de izquierdas opina que la sanidad precisa de un gasto expansivo y no restrictivo, por lo que la vigilarán "con lupa".