"Soy bastante presumido"

Antes de subir a un escenario, Antonio Álvarez Vélez, alias Pitingo, trabajaba transportando maletas en el aeropuerto madrileño de Barajas. Allí ya cantaba. Ahora a sus 27 años está recorriendo España con su espectáculo Soulería, de igual nombre que el hasta ahora su primer y único disco. Adivinen la mezcla del cantante.

Pregunta. ¿Qué une a la bulería y al soul?

Respuesta. Yo mismo. La raza negra y la gitana se han llevado siempre muy bien porque han pasado muchas fatigas.

P. ¿De dónde viene su nombre?

R. A mi bisabuelo ya lo llamaban Pitingo, significa presumido. Yo también soy bastante presumido. Me gusta arreglarme.

P. Flamenco metrosexual...

R. A veces salgo a comprar el pan con chanclas y bañador.

P. ¿Ha tirado algún televisor por la ventana, en plan estrella del rock?

R. Nunca. Los gitanos no rompemos televisores, nos partimos la camisa. Y yo me he partido muchas.

P. ¿Qué hace bien además de cantar?

R. Los pucheros y unas coquinas riquísimas.

P. Y si usted no fuese cantante...

R. Sería pintor. Mi madre se dedicaba a pintar cuando estaba embarazada y todos sus hijos tenemos ese talento.

P. ¿Sobre qué no tiene ni idea?

R. Política. No tengo ni papa... ni quiero.

P. ¿Cuál es el consejo que siempre sigue?

R. Estate tranquilo y ahorra. Es que soy hiperactivo.

P. ¿Y fue la última cosa ilegal que hizo?

R. Fumarme un cigarro en el aeropuerto. No me podía aguantar.