Ainia impulsa la planta extractiva pionera Altex

El Parque Tecnológico de Paterna cuenta con un importante referente en la tecnología industrial. Ayer entró en funcionamiento Altex (Alta Tecnología Extractiva, SA), la primera planta de España que utiliza el CO2 en estado supercrítico para la extracción y purificación de componentes de alto valor destinados a productos de consumo. Hasta ahora, las empresas químicas, farmacéuticas, cosméticas y alimentarias españolas efectuaban este proceso con disolventes, lo que aparte de producir muchos residuos no les permitía vender sus productos en los países con mayores requerimientos medioambientales.

Para salvar esa barrera tenían que acudir necesariamente a Alemania, Japón o los Estados Unidos, que eran los países que disponían de esta tecnología de fluidos supercríticos que permite la extracción y purificación de componentes de alto valor para productos de consumo. El centro tecnológico Ainia llevaba 12 años realizando investigaciones sobre los fluidos en estado supercrítico para procesos extractivos y de purificación, y, consciente de la necesidad que tenía la industria española de tener al alcance esta tecnología, apostó por impulsar una planta en Valencia.

Se trata, explicó Sebastián Subirats, el director de Ainia, de "una industria al servicio de la industria" que, aseguró, cuenta "con más innovaciones que las plantas de estas características que existen en el mundo", ya que la del Parque Tecnológico es multiproducto. Ainia posee el 70% de Altex y las sociedades Exxentia Grupo Fitoterapéutico, compañía líder en biotecnología extractiva, y Monteloeder, SL, empresa especializada en fabricación y suministro de materias primas, se reparten el resto por igual. Con una inversión inicial de tres millones de euros, la planta prevé facturar a corto plazo seis millones anuales.

Ceder acciones

Ainia acaba de efectuar una ampliación de capital en el proyecto de alrededor de un millón de euros y su propósito, según manifestó Sebastián Subirats, es, cuando se logre el punto de equilibrio presupuestario, acometer una ampliación de la planta. Asimismo, el propósito del centro tecnológico es ir cediendo parte de su 70% en el proyecto para que, manteniendo siempre la mayoría para garantizar la infraestructura, otras empresas usuarias de la tecnología puedan incorporarse a la iniciativa.