Pedazos de amor

Desde el fundacional El columpio (Álvaro Fernández Armero, 1992), algunos de los mejores cortos españoles de la última década y media estaban basados en una cita relacionada con el amor y/o el sexo: Post coitum, El paraguas, Nada que perder, La explicación... Razones: a) los directores suelen tener entre 20 y 30 años, y a esa edad se tiene infinita experiencia en el tema; b) la situación es la ideal para contar en 10-20 minutos. Los debutantes Peris Romano y Rodrigo Sorogoyen unen así en 8 citas otras tantas piezas, con las que reflexionan sobre las fases del amor, huyendo de la pretenciosidad y agarrándose a la frescura y al valor de la interpretación. No todas están al mismo nivel y, sin necesidad de resultar trascendente, se echa en falta una intencionalidad unitaria, pero el estreno resulta estimable y posee un objetivo claro: el poder de la identificación de la audiencia.

Mejor en el retrato de la mirada cómplice o esquiva -el primer acercamiento, la reunión de los ex-, en la réplica directa -la mañana siguiente-, y en el dolor de la pérdida -la discoteca-, que cuando se notan los esfuerzos para provocar la risa mediante una situación embarazosa -la cobardía en el sofá, la cena familiar, la juerga en el spa-, 8 citas confirma además a una serie de intérpretes que se han dado a conocer en televisión, caso de Belén López, Javier Pereira, Raúl Arévalo, Cecilia Freire, María Ballesteros y Arturo Valls.

Tráiler de '8 Citas'