Un pacto por la calidad

A punto de cumplir 30 años desde la aprobación de la Constitución, las familias con hijos con discapacidad intelectual, reunidas y asociadas en FEAPS Madrid, valoramos positivamente los avances conseguidos.

En el origen del Movimiento Asociativo de Familias FEAPS hay mucho empeño, coraje y sacrificio. Las primeras familias que sacaron a sus hijos del aislamiento se encontraron con muchas dificultades: unas, de tipo material (ausencia de medios y profesionales); otras, aún más duras, de tipo social (desconocimiento, estigmas). Pero de todas ellas se ha ido saliendo gracias a una red de centros y servicios extendida por toda nuestra Comunidad, que a día de hoy atiende a 1.600 niños menores de seis años en atención temprana, 800 alumnos en educación especial, 3.500 adultos en centros ocupacionales, 750 adultos en centros de día, 1.800 adultos y menores en residencias y pisos tutelados, 2.300 en centros de ocio, 1.400 en empleo protegido y empleo con apoyo y cerca de 34.000 actuaciones al año en programas de familia, formación, vacaciones, deporte, respiro familiar, etcétera. Para ello, contamos con cerca de 5.000 profesionales.

Desde el año 2000, nuestra comunidad dispone de planes para mejorar las condiciones de vida de las personas con discapacidad. El próximo año culmina el segundo de ellos. Su desarrollo ha permitido extender y reforzar la red. Pero el logro de más alcance en estos años ha sido pasar de un sistema de financiación subvencionado a otro mucho más estable: la contratación como servicio público. Al esfuerzo financiero de la Comunidad se ha sumado el de FEAPS, que ha ido poniendo a disposición de la Consejería de Familia y Asuntos Sociales los centros, los profesionales, el compromiso social de las propias familias y unos acreditados conocimientos técnicos.

Durante este tiempo, las Asociaciones de Familias prefirieron demorar algunas reivindicaciones de mejora, para favorecer la consolidación del modelo. Ahora que la Administración y el movimiento asociativo coincidimos en que se ha cumplido ese objetivo, llega el momento de abordar esas reivindicaciones pendientes. Graves problemas acechan al sector y están afectando ya a la prestación de los servicios que nuestros hijos requieren:

- Escaso personal consecuencia de ratios insuficientes que dificultan modelos de trabajo inclusivos en la comunidad.

- Descapitalización de los inmuebles y equipamientos.

- Rotación excesiva y creciente del personal, como consecuencia de sueldos que en muchos casos no llegan el 50% de salario medio de nuestra comunidad. Por otro lado, nos encontramos con que la Consejería de Familia y Asuntos Sociales dispone de una red pública de centros, similar a la expuesta, y recientemente ha sacado a concurso público recursos propios con unas condiciones de ratio y de financiación mucho más adecuadas y favorables. Proponemos un diálogo rápido y productivo. Sólo con ello evitaremos el conflicto. La entrada en vigor de la Ley de Promoción de la Autonomía y Atención a personas en situación de dependencia nos brinda la oportunidad adicional de revisar enfoques y condiciones caducados. Para conseguirlo, resulta imprescindible abrir un cauce de diálogo y colaboración con la Comunidad de Madrid.

Mariano Casado es presidente de la Confederación Española de Organizaciones en favor de las Personas con Discapacidad Intelectual (FEAPS) Madrid