La cuna de Red Bull y una sede olímpica
España disputará la primera fase en Salzburgo e Innsbruck

España apenas hará las maletas durante la primera fase de la Eurocopa. La selección jugará sus dos primeros partidos, frente a Rusia el 10 de junio y contra Suecia el 14, en Innsbruck, al oeste de Austria, y sólo viajará para su último encuentro, el 18 contra Grecia, a Salzburgo, a 185 kilómetros y dos horas de viaje en tren. Como en toda la Eurocopa, le esperan estadios no excesivamente grandes. En Innsbruck jugará en el Tivoli Neu, inaugurado el pasado octubre con un partido entre Austria y Costa de Marfil, y en Salzburgo en el Wals Siezenheim, con un techo eléctrico y que ha sustituido recientemente su hierba artificial por césped natural. Ambos campos tienen una capacidad para 30.000 espectadores después de las últimas modificaciones.
La selección prefería, sin embargo, disputar sus encuentros de la liguilla en Suiza, donde los desplazamientos son más cortos. A cambio, encontrará más serenidad en Innsbruck, la capital del Tirol, una ciudad de unos 130.000 habitantes, que ha acogido dos Juegos Olímpicos de Invierno (1964 y 1976). Su mejor embajador es Hansi Müller, el ex centrocampista alemán que jugó en el Tirol y ganó la Eurocopa de 1980 en Italia y fue subcampeón del Mundial de 1982.
España viajará luego a Salzburgo, la ciudad de 150.000 habitantes donde Mozart nació en 1756 y donde más de dos siglos después nació el imperio Red Bull, cuyo propietario, al comprar el club local, el Casino, en 2005, le cambió de nombre y borró incluso su historia, que incluía a jugadores como Bierhoff y Polster. Des pués fichó de entrenadores a Trappattoni y Mathaus, y ganó la Liga.
Ingresos: 1.250 millones
Los aficionados que deseen acudir a Innsbruck deberán hacerlo en tren, ya que la ciudad no posee aeropuerto. Salzburgo dispone, en cambio, de aeródromo.
En caso de clasificarse, los cuartos de final llevarán al equipo español a Viena o Basilea, donde se disputarán también las semifinales. La final será en la capital austriaca.
La UEFA calcula generar unos ingresos de 1.250 millones de euros durante la Eurocopa, un 45% más que en la pasada edición de Portugal 2004, entre derechos televisivos (un 64% del total), derechos comerciales (20%), venta de entradas (7%) e ingresos hoteleros (9%).
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