Comienza la instrucción por la muerte del obrero sin contrato en Cádiz

El juzgado de instrucción número uno de Cádiz ha comenzado a tomar declaración a los primeros testigos del último accidente laboral mortal ocurrido en la capital gaditana el pasado 11 de septiembre. El obrero Jesús Mera, de 48 años, falleció tras precipitarse al vacío de una obra en un edificio del casco antiguo en la que estaba trabajando a pesar de no tener contrato. Los compañeros de faena, entre ellos el encargado de obra, comparecieron ayer ante el juez.

Hoy deberá declarar ante el juez la familia de la víctima fallecida en el accidente laboral de Cádiz. También lo hará una vecina del inmueble donde ocurrió el siniestro, quien asegura que no se cumplían las medidas de seguridad. De hecho, aportará un vídeo que ella misma grabó cuando la obra quedaba vacía.

Por este caso la Policía detuvo a cuatro personas: dos constructores, el promotor de la obra y el arquitecto que firmó el proyecto, que permanecen en libertad con cargos. Ayer, entre los compañeros de trabajo que acudieron a declarar, estaba el encargado de la obra que, según fuentes judiciales, fue emplazado a otra fecha y podría ser llamado a declarar en calidad de imputado. Finalmente, sólo declararon tres trabajadores para explicar la situación en la que se encontraba la obra.

Esta fase de la instrucción continuará, al menos, hasta mañana. Hoy está previsto que pasen por el juzgado la viuda y el hijo de la víctima. Este último fue testigo del accidente ya que también estaba colaborando en la finca en rehabilitación donde falleció su padre. Como él tampoco tenía contrato. El juez también escuchará el testimonio de otro empleado que ha denunciado haber estado en la misma situación de riesgo que Jesús Mera y el de la vecina del inmueble, Antonia Reyes, quien meses antes del siniestro había alertado del incumplimiento de las medidas de seguridad en la obra. De hecho, presentó varias denuncias por escrito ante la Inspección de Trabajo y el Ayuntamiento de Cádiz sin que ninguno de estos organismos actuara.

Reyes alertó de caída de cascotes y también del nulo uso del casco o de arneses de seguridad. La vecina explicó ayer que dos días antes del accidente se encontró por la calle con el concejal de Urbanismo, José Loaiza (PP), al que ya había avisado varias veces de los problemas en la obra. "Allí están haciendo salvajadas, le dije. La casa está mal y están haciendo chapuzas. Me dijo que enviaría un técnico. Eso fue el domingo y el martes ocurrió [el accidente]", relató.

Para mañana se espera la declaración de los responsables de la Inspección de Trabajo en Cádiz. El consejero de Empleo, Antonio Fernández, había anunciado una investigación para aclarar por qué este órgano no actuó a pesar de las denuncias presentadas por los vecinos del inmueble. Según relata Antonia Reyes, en la sede de Trabajo en Cádiz se le dijo que enviarían un inspector en un plazo de entre uno y seis meses. Cuando ocurrió el siniestro todavía no había acudido.

Acusación popular

CC OO confirmó ayer su intención de personarse en el caso como acusación popular. "El trabajador no estaba dado de alta y había denuncias previas ante la Inspección de Trabajo", explicó el abogado de la secretaría de seguridad laboral de CC OO, Ricardo Gil. De momento, la acusación particular -que ejerce la familia del fallecido- y la Fiscalía están recabando las pruebas necesarias para demostrar un doble delito de los imputados: contra los derechos del obrero y de homicidio por imprudencia.