Vilanova recurre contra la prohibición de construir un hotel en la costa

El Ayuntamiento de Vilanova i la Geltrú (Garraf) presentó ayer un recurso contra la decisión del Ministerio de Medio Ambiente de prohibir la construcción de un hotel en una plaza de la localidad que se adentra en el mar. El proyecto hotelero está previsto en el plan especial del puerto de Vilanova, que cuenta con el visto bueno del consistorio y de la Generalitat.

El gobierno local considera que la construcción del hotel es positiva, por lo que no tira la toalla para conseguir que el proyecto salga adelante. La Generalitat aprobó en junio el plan especial del puerto, que incluye varias acciones en la zona portuaria de la población, entre ellas el hotel. Antes de dar luz verde, la Administración autonómica solicitó un informe previo a la Dirección General de Costas del Ministerio. Fue entonces cuando éste contestó prohibiendo su construcción. Ahora el consistorio ha entregado a los juzgados un recurso contra esta resolución, aunque no supone la paralización del resto de proyectos del plan especial del puero.

En un primer momento se planteó un hotel de seis plantas, aunque el mismo Ayuntamiento (gobernado por el PSC, ERC e ICV) rebajó las dimensiones del edificio dejándolo en un equipamiento de tres plantas para evitar un impacto visual excesivo. El equipo de gobierno de Vilanova ha reaccionado presentando el recurso para poder disponer del expediente del ministerio y así conocer con detalle las razones por las que, de momento, debe descartarse el hotel. El concejal de Urbanismo, Joan Martorell, explica que el ejecutivo local quiere saber si la resolución ministerial deja margen a la interpretación para continuar reivindicando su proyecto. Si no es así, asegura que se aplicará lo que determine el Gobierno central, de acuerdo con la legislación actual. Martorell entiende que el Ayuntamiento tiene que saber los motivos exactos por los que la Dirección General de Costas rechaza el hotel, teniendo en cuenta que es un proyecto aprobado por el pleno municipal, y que en su día pasó por un proceso de participación ciudadana.

El gobierno de Vilanova insiste en que el proyecto hacía compatible la actividad hotelera con la preservación del paisaje marítimo de la ciudad. La oposición (CiU, PP y CUP), en cambio, alerta del impacto visual que se podría generar.