Telefónica logra un récord de 1,7 millones de accionistas

Telefónica tiene más dueños que nunca. La compañía ha alcanzado los 1,76 millones de accionistas, una cifra récord, tras haber aumentado en cerca de 200.000 su base accionarial en el último año. El presidente de la operadora, César Alierta, reforzará en la junta general que se celebra hoy su compromiso de incrementar la política de dividendos. La acción se revalorizó un 26,8% el año pasado.

Telefónica vuelve a estar de moda entre los pequeños inversores. Tras la estampida que provocó la llamada burbuja tecnológica, ha vuelto a recuperar la confianza de los ahorradores y cuenta ya con 1.765.599 accionistas (a 2 de marzo pasado), una cifra récord en su historia.

En 2006, incrementó en cerca de 200.000 el número de accionistas, aupándose como segunda firma española con mayor base accionarial, tan sólo superada por los 2,3 millones de socios del Santander. En ese aumento influyó también la fusión por absorción de Telefónica Móviles, cuyos accionistas recibieron títulos del grupo a cambio de los de la filial.

Los accionistas están convocados hoy a la junta general. César Alierta comparece en la reunión por primera vez desde que accediera a la presidencia de la empresa en 2000 con todos los deberes cumplidos. La compañía se ha convertido, tras China Mobile, en la operadora de telecomunicaciones que más dinero gana (6.233 millones de euros), la tercera por número de clientes (203 millones) y la cuarta por capitalización bursátil. Pero lo más importante para los accionistas y la asignatura pendiente de Alierta hasta ahora es que, tras el mal año de 2005, la cotización respaldó la gestión y los títulos se revalorizaron el año pasado un 26,8%.

Con este bagaje, Alierta aprovechará su intervención en la junta para redoblar su mensaje de aumentar la política de dividendos e incluso podría afinar su compromiso de alcanzar un euro por acción en 2009. El dividendo con cargo a los resultados de 2006 es de 0,6 euros. La junta estudiará, entre otros asuntos, la reducción de su capital social en casi un 3%, procedente de autocartera, y la modificación de estatutos para adaptarse al código unificado de buen gobierno.

Tras su entrada en el capital de Telecom Italia, la compañía tiene dos asuntos pendientes. El primero es la venta de Endemol. Mañana se cierra el plazo para presentar ofertas vinculantes para los cinco candidatos que han mostrado su interés por hacerse con la productora de televisión. El segundo es la compra de Vivo, la operadora brasileña cuyo capital comparte con Portugal Telecom.