Gas Natural no halla averías previas en el siniestro de Lleida

Los técnicos de Gas Natural no han encontrado de momento ninguna anomalía en el edificio de Lleida donde el lunes se produjo una explosión que causó dos muertos. La investigación abierta por los Mossos d'Esquadra, en colaboración con los técnicos de la compañía, será para determinar si la causa de la explosión se debió a un error humano o a una manipulación intencionada de las conducciones en el interior del local.

En el siniestro ocurrido en el restaurante Exquisit, ubicado en el barrio de Cappont, perdieron la vida dos personas -el hijo del propietario del local, que dormía en su interior, y un vecino, que sufrió un infarto cuando regresó de trabajar y vio el edificio en llamas- y obligó a desalojar a 56 vecinos de dos edificios. La mitad pudo regresar a sus casas a última hora de la tarde de ayer y el resto podrá hacerlo entre el jueves y el viernes, una vez reparados los desperfectos y restablecidos todos los servicios afectados por la explosión.

Un portavoz de Gas Natural dijo ayer que no será fácil para los investigadores precisar la causa de la deflagración ni el punto exacto en el que se produjo la fuga en el interior del restaurante "porque las instalaciones interiores quedaron muy destrozadas". El 19 de mayo de 2005, el propietario del restaurante superó sin problemas la revisión obligatoria de cada cuatro años.