Alonso no da tregua

Los 9.100 aficionados que ayer se acercaron al circuito de Cheste constataron que Fernando Alonso no está dispuesto a conceder ninguna tregua a sus rivales ni en los entrenamientos. Kimi Raikkonen, en cualquier caso, continúa sin inmutarse, administrando sus intervenciones. El piloto finlandés de Ferrari debía contraatacar tras el fiasco del martes, cuando el español y su nuevo McLaren MP4/22 rodaron un segundo más rápido; un margen considerable si se atiende a las reducidas medidas de la pista (4.005 metros). Raikkonen, de 27 años, tampoco pudo ayer con el vigente campeón del mundo, de 25, que, una vez más, fue el más veloz de todos los competidores. Además de conseguir el giro más rápido, en 1m 12,582s, el ovetense fue el segundo que más vueltas dio (86), a pesar de que la mala meteorología obligó a los equipos a colocar neumáticos de lluvia.

"Hay muchas cosas nuevas que probar en el coche, pero el tiempo tan cambiante no ha permitido ponerlas en práctica", se lamentó Alonso. Consciente de que todas las miradas se centran en comparar sus maniobras a las que realiza Raikkonen, quien debe plantarle batalla por el campeonato, el asturiano negó estar ya compitiendo. "No existe pique con Ferrari", zanjó Alonso que, con su afirmación, echó un cable al finlandés.

"No estoy pendiente de lo que hacen los demás ni de qué equipos están rodando", contestó Raikkonen, el cuarto más rápido ayer tras dar 51 vueltas. "Se necesita rodar más para poner el coche a punto. Hoy [por ayer] he intentado ir rápido pero aún necesito más vueltas", consideró el nuevo piloto de Ferrari que, al término de la sesión, fue dos décimas y media más lento que Alonso.

El español ya pudo contar con la ayuda de Pedro De la Rosa, piloto probador de McLaren, una vez fue reparado el coche que Lewis Hamilton estrelló la semana pasada. "Hemos perdido una jornada de trabajo por lo que rodaremos más para recuperar", avisó Alonso, que hoy volverá a compartir asfalto con su nuevo compañero de equipo. Tanto Ferrari como McLaren y Honda pidieron alargar los entrenamientos una jornada más.