Veteranos del verso

¿Quiénes son? En 1952 recibió José Manuel Caballero Bonald (Jerez de la Frontera, 1926) su primer premio, Platero, por el poema Mendigo. En 2006, la culpa del nuevo galardón -el Nacional de Poesía- la ha tenido Manual del infractor, un poemario, sí pero también toda una declaración de intenciones, de indignación, de actitud y de vida. Entremedias, ha habido muchos más premios como el Reina Sofía de Poesía o Nacional de las Letras; otros países como Colombia, Cuba o Estados Unidos, y mucha letra escrita, en versos, en novelas (como Dos días de septiembre, 1962, o las memorias Tiempo de guerras perdidas, 1992, y La costumbre de vivir, 2001) y ensayos.

Con Sublevación inmóvil en 1960, llegó Antonio Gamoneda (Oviedo, 1931) a las librerías. Desde León escribió sobre la dura posguerra, sobre la miseria y el frío, sobre la falta de libertad. Y cuando todo acabó, cuando el dictador murió, Gamoneda surgió del vacío con su voz, aún más grave y profética, en obras como Descripción de la mentira (1977) o Libro del frío (1992). Versos profundos que trajeron la luz sobre un poeta que durante tanto tiempo permaneció oculto.

¿Qué regalan? Caballero Bonald cita los títulos de los "dos únicos libros" que ha regalado este año: Obras completas I, de José Ángel Valente (Galaxia Gutenberg), y la novela Autómata, de Adolfo García Ortega (Bruguera). Gamoneda responde que el libro que más ha regalado este año ha sido la última recopilación de su poesía Esta luz. Poesía reunida, 1947- 2004 (Galaxia Gutenberg).