La fiscalía pedirá 94 años para nueve integrantes de una célula islamista

El fiscal de la Audiencia Nacional Pedro Rubira pedirá entre 10 y 12 años de cárcel para los nueve presuntos integrantes de una célula islamista, desarticulada en la llamada Operación Nova, que en 2003 decidió impulsar atentados contra intereses españoles a medida que España se aliaba con Estados Unidos en guerras como las de Irak o Afganistán.

Rubira hará la petición por el delito genérico de integración en organización terrorista en el juicio que se celebrará próximamente en la Audiencia Nacional contra el grupo, dos de cuyos presuntos miembros -Mohamed El Ouazzani y Khalid Zeimi Pardo- fueron sorprendidos en las inmediaciones de la central nuclear de Zorita (Guadalajara) con una máquina de fotos y en circunstancias "no lo suficientemente aclaradas".

En sus conclusiones provisionales, Rubira considera que los acusados Mohamed Larbi Ben Sellam y Faisal Allouch, imputado por los atentados del 11-M, eran dirigentes de la célula y por ello pide que se les imponga la máxima pena por el delito de pertenencia a organización terrorista, 12 años de prisión. Para el resto, solicita 10. La célula, según Rubira, fue creada en 2003 por Mustapha El Maimouni, actualmente encarcelado en Marruecos por su implicación en los atentados de Casablanca, en 2003.