La CMT prohíbe a Euskaltel y Orange pelear por sus clientes

Euskaltel no podrá por ahora captar los 450.000 clientes de telefonía móvil que comparte en el País Vasco con su antiguo socio Orange (antigua Amena). La Comisión del Mercado de Telecomunicaciones (CMT) acordó ayer prohibir a la compañía vasca que se dirija a esos clientes para intentar que se abonen a la nueva firma de telefonía móvil que va a lanzar en enero de 2007. Tampoco Orange podrá dirigirse comercialmente a esos usuarios para intentar retenerlos.

Ésta es una de las medidas cautelares adoptadas por la CMT ante el conflicto surgido entre ambas firmas a raíz de que Euskaltel decidiera romper la alianza que mantenía desde 1998 con Orange, tras llegar un acuerdo con Vodafone para poder ofrecer servicios de telefonía móvil en el conjunto de España con su marca. La filial de France Télécom reclamó como suyos esos clientes, mientras que Euskaltel aseguró que ofrecería a todos esos abonados pasarse a su nueva compañía.

No se podrán 'portar'

Precisamente, la CMT deniega la petición de Euskaltel, que quería tener acceso a los datos de Orange para facilitar la migración de los clientes a su red, mediante el mecanismo de la portabilidad, que permite cambiar de compañía conservando el número.

El regulador considera que esta solicitud constituye "el fondo de la presente controversia y se podrían ocasionar graves perjuicios económicos a Orange en el supuesto de adoptarse".

La CMT también obliga a ambas compañías a continuar de manera provisional con la relación contractual que mantenían desde diciembre de 1998, con el fin de garantizar la calidad en la prestación del servicio a los clientes. No obstante, se trata sólo de medidas cautelares a la espera de la resolución definitiva del conflicto que, dada su gravedad y el número de clientes afectados, se tramitará con carácter de urgencia.