El PNV decide apoyar los Presupuestos e IU se abstendrá

Los terceros Presupuestos del Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero parecían anoche salvados: el PNV alcanzó un prinicipio de acuerdo con el PSOE para retirar su enmienda a la totalidad e IU, que se mantiene en la abstención, alcanzó un compromiso interno para garantizar que, si su voto es imprescindible para que no sean derrotados, lo dará.

El Grupo Socialista ha intensificado durante este fin de semana su despliegue negociador, y anoche estaba reunido o en permanente contacto tanto con el PNV como con Izquierda Unida. Los números son muy apurados. El PSOE sólo cuenta desde la semana pasada con sus 164 escaños, los tres de Coalición Canaria, dos del BNG y uno de la Chunta. Nafarroa Bai ha anunciado su abstención. Esto es, 170 apoyos asegurados, siempre que acudan a votar todos los diputados, incluidos los ministros.

Cada voto es imprescindible, y por eso el PSOE, por primera vez, ha llevado ante el vicepresidente económico, Pedro Solbes, a cada uno de los portavoces del Mixto para buscar su apoyo. Enfrente, los socialistas tienen un bloque compacto formado por el PP (146), CiU (10), ERC (8) y EA (1), esto es, 165. Por eso el PNV, con sus siete diputados, inclina la balanza a uno u otro lado.

Cupo vasco

Los nacionalistas han tenido un contacto durante el fin de semana que desbloqueó las negociaciones sobre el único punto, ajeno a los Presupuestos, realmente relevante para esta formación: el cupo vasco. Una compleja negociación técnica, que se basa en cuestiones de interpretación de la ley que lo regula, tiene enfrascados hace meses a Economía y al Gobierno vasco. Sólo la presión por el enorme valor de los votos nacionalistas parecía anoche haber desbloqueado el forcejeo a favor de las tesis nacionalistas. El PSOE también cuenta con el mecanismo de presión de los Presupuestos vascos, en los que los nacionalistas necesitan el apoyo del PSE si no quieren verse forzados a recurrir al Partido Comunista de las Tierras Vascas.

La Permanente de Izquierda Unida se reunió ayer para resolver la disyuntiva en la que se encuentra. Gaspar Llamazares había pactado con los suyos que se abstendrían, pero el Gobierno quiere atraerse a los cinco diputados de IU-ICV, y ha ofrecido durante el fin de semana mejoras en las pensiones o en políticas medioambientales para atraérselos.

Ayer la dirección de IU, con 20 votos a favor, 1 en contra y 4 abstenciones, alcanzó un acuerdo complejo. La formación mantiene su intención de abstenerse, pero otorga al grupo parlamentario la posibilidad de cambiar de opinión en el último momento si el Gobierno ofrece mejoras sustanciales. En realidad, el pacto alcanzado internamente es más prosaico: se acordó que si el PNV mantuviera pese a todo su enmienda a la totalidad, y los Presupuestos corrieran el riesgo de ser devueltos, IU prestaría sus votos al Gobierno para garantizar la estabilidad.