Gómez Marchante se lo lleva todo

Todo hacía prever que la Vuelta al País Vasco se iba a dirimir entre Samuel Sánchez y Alberto Contador, el aspirante, más capacitado en principio para la contrarreloj de 24 kilómetros en Zalla que significaba la conclusión de la carrera. Pero se coló un invitado imprevisto y algo imprevisible. El intrépido José Ángel Gómez Marchante (Madrid, 1980), el corredor del Saunier Duval que el martes se ganó la reprimenda de su director, Josean Fernández, por un ataque "suicida y estúpido", arregló el agravio con un sensacional despliegue que le condujo al triunfo e invalidó la respuesta de un activo Valverde.

Porque fue el murciano quien comenzó a desbaratar el esquema de carrera. Se esperaba a Sánchez y Contador, pero los primeros registros apuntaban a Valverde, a diez segundos del asturiano en la general, como algo más que una amenaza. Entró en meta con su sonrisa habitual, tal vez pensando que la carrera era suya. Y lo era, hasta que surgió Gómez Marchante. El ciclista del Saunier Duval, que acumulaba nueve segundos de retraso con el líder, realizó peores tiempos que Valverde en la primera mitad de la etapa, pero aceleró su pedalada en los últimos repechos. Sólo Contador, igualado en la general con Sánchez, podía negarle la alegría. Sin embargo, se atascó y no supo hallar la solución. El podio lo completaron Valverde y Toni Colom.