El alcalde de Sabadell dice que no ayudar a Unidad Hermética es "irresponsable"

El alcalde de Sabadell, el socialista Manel Bustos, exhortó ayer a la Generalitat a que "valore todas las posibilidades" de salvar a la italiana ACC, la ex Unidad Hermética, que emplea a 800 trabajadores en Sabadell (Vallès Occidental) y 200 en Cervera (Segarra). A juicio de Bustos, "sería una falta de responsabilidad" no intentar hallar una solución a la crisis porque "la antigua Unidad Hermética no es un asunto local, sino que la empresa es un referente".

Las declaraciones del alcalde sabadellense se producen tras su viaje a la ciudad italiana de Mel para reunirse con la dirección de la matriz. Ésta le trasladó que la continuidad de la multinacional en Cataluña está estrechamente ligada a las ayudas que pueda recibir de las administraciones.

Los directivos, que hace un par de meses pidieron a la Generalitat 18 millones de euros para mantener la actividad, insisten en reclamar financiación. A cambio, se comprometen a trasladar a la planta de Sant Quirze del Vallès cinco líneas de producción, que ahora están en las factorías italianas de Mel y Rovigo. Ello comportaría la modernización de la maquinaria de la planta vallesana y una inversión de 50 millones de euros.

La operación garantizaría la viabilidad de la empresa y Cataluña se convertiría en el único fabricante de un tipo de compresor industrial. ACC está especializada en compresores para frigoríficos.

La Agencia Catalana de Inversiones (ACI) considera insuficiente el plan industrial y le ha exigido que presente otro más detallado. La empresa sostiene que la reciente venta de las naves al Banco Popular por 12 millones de euros no es un paso previo al cierre, aseguraron los directivos a Bustos.