Ripoll avisa de que no parará hasta que el PP expulse a Manuel Ortuño

Uno de los grandes frentes que tiene abierto el PP en Alicante, la pelea entre el ex subdelegado del Consell en Elche, Manuel Ortuño, con la dirección provincial que controla el zaplanismo a través de José Joaquín Ripoll, ha vuelto a activarse en vísperas de la de la declaración judicial de dos concejalas de Elche por la supuesta manipulación de los centros de militantes. Ortuño, en una carta dirigida a dos ediles de Alicante que apoyan a Ripoll, acusó a éste de "abusar de su debilidad en la ingesta de refrescos alcohólicos". Ripoll consideró ayer "repudiables" las declaraciones realizadas por Ortuño sobre su persona y sobre la vida privada de la diputada popular Enriqueta Seller. "Dedico bastante tiempo como presidente provincial del PP a que el señor Ortuño no sea miembro del partido, de momento no estoy teniendo mucho éxito, pero desde luego no voy a cejar en ese empeño", indicó Ripoll. No obstante, comentó que no va a "entrar en su juego" ni a "dedicarle ni un minuto para que eso vaya a los juzgados", sino que lo que pretende es que Ortuño "deje de estar en el partido" y para ello va a "apelar a todas las instancias para que tomen las medidas para que no esté".

El secretario general del PP en Alicante, Miguel Peralta, manifestó a Efe que espera que "se adopten de manera inmediata las medidas disciplinarias" contra Ortuño. "¿Qué más tiene que hacer y decir Ortuño para que se le expulse del PP?", se preguntó Peralta, quien exigió que el Comité de Derechos y Garantías del partido, presidido por Federico Trillo, resuelva el expediente abierto al ex subdelegado del Consell.