"El Manchester premia jugar mal"

La entrevista censurada en el canal televisivo del Manchester a Roy Keane, su capitán, ha tardado 24 horas en filtrarse a la prensa británica. La colección de frases por las que el director general del club, David Gill, abortó la emisión comienza con un ataque directo al central Rio Ferdinand: "Parece que el club está recompensando el jugar mal, quizá eso sea lo que haga yo cuando regrese. No entiendo cómo por cobrar 120.000 libras a la semana y jugar bien 20 minutos contra el Tottenham uno se puede creer una superestrella", comentó el veterano medio irlandés en alusión al que en su día fuera el traspaso de mayor cuantía del fútbol inglés.

"Me esperaba perder 4-1 contra el Middlesbrough. A los jugadores se les piden respuestas y no las dan. Estoy harto de tener que decir cosas y ellos de escucharme", acusó, ya de manera general, al resto de sus compañeros.

El futbolista, de 34 años, denunció, siempre según el rotativo Daily Mirror, que los veteranos del equipo "no ayudan a los chavales nuevos" y pidió a la entidad de la que es propietario el magnate estadounidense Malcolm Glazer, que no fiche en el mercado de invierno: "Se habla de traer ahora jugadores, pero deberíamos hacer lo contrario. Lo que debemos hacer es incentivar a los que están para que jueguen mejor y lo den todo".

Keane comentó ayer que no estaba "arrepentido de sus palabras". No es la primera vez que el medio carga contra sus compañeros de vestuario. Ya advirtió de que algunos jugadores de su equipo estaban "únicamente interesados en los sandwiches de gambas". También mantuvo un fuerte enfrentamiento con el seleccionador de irlanda, Mick McCarthy, y abandonó al equipo de su país antes del Mundial de Corea y Japón en 2002.

Su técnico, Alex Ferguson, rehusó comentar las declaraciones y achacó la salida de tono de Keane a que "cuando se pierde un partido todo el mundo está decepcionado".