La música europea acapara el Certamen de Coros de Tolosa

La 37ª edición del Certamen de Coros de Tolosa, que celebrará su fase competitiva entre el 28 y el 30 de octubre próximos, tendrá un marcado sello europeo. Catorce de las veinte agrupaciones que aspiran a lograr algún premio proceden de este continente y no por casualidad. Más allá de razones obvias de proximidad y economía, en Europa existe "una gran tradición y calidad coral, sobre todo en el centro y en Escandinavia", resaltó ayer Ana Arretxe, presidenta del Centro de Iniciativas de Tolosa, entidad organizadora del certamen, en el que no participa ni un coro vasco. Arretxe justificó así esta ausencia: "No todo el mundo se atreve a cantar en casa y arriesgar su prestigio".

El concurso, cuyo jurado presidirá el director de coros y profesor de Musikene Enrique Azurza, se celebrará en la ciudad deportiva Usabal -el Teatro Leidor está en obras- dividido, como cada año, en las modalidades de canción vasca y polifonía para voces mixtas, música religiosa y profana para grupos vocales y coros infantiles. Todos ellos competirán además por el Gran Premio Kutxa (2.000 euros) que otorga la nominación al Gran Premio Europeo de Canto Coral -se celebrará en Tolosa el 18 de junio- y por el del público.

En todo caso, esta iniciativa supone más que un mero concurso. Este año ofrecerá dos conciertos especiales en Tolosa: el del coro alemán Die Singphoniker el 31 de octubre en la iglesia de San Francisco y el que ofrecerá la formación cubana Claras Luces un día después, además de 75 actuaciones protagonizadas por las corales participantes en el certamen en 40 pueblos del País Vasco, Navarra, País Vasco francés, Aragón y Cantabria.