Los resquemores del asturiano

Cuando alguien está a punto de vivir uno de los momentos más importantes de su vida su cabeza debería estar hirviendo de alegría y, en teoría, debería costarle frenar la emoción y la tensión de los últimos momentos. Sin embargo, es evidente que la mente de Fernando Alonso funciona de otra manera. En una multitudinaria conferencia de prensa celebrada el jueves, el piloto asturiano, de 24 años, mostró todos sus resquemores y confesó que ser el piloto más joven de la historia en convertirse en campeón del mundo no es algo que le cree sentimientos especiales. "Si no lo gano ahora y soy campeón dentro de dos años, para mí supondrá exactamente lo mismo", confesó.

Sin embargo, lo más sorprendente fue la actitud desafiante que mostró ante quienes considera sus detractores. "En España habrá mucha gente que se alegrará si finalmente no soy campeón del mundo", aseguró de forma sorprendente. "Yo digo la verdad, lo que pienso".

Aún fue más lejos cuando se le consultó qué pensaba del hecho de que algunos medios de información británicos cuestionaban su título, aduciendo que el campeón no sería este año el mejor piloto del mundo. Ellos creen que el mejor es Kimi Raikkonen. Entonces, tranquilo, sin prisas, como susurrando, comentó: "Para mí el campeón es siempre el que más puntos gana y hasta ahora ése soy yo. Pero si alguien piensa que no merezco el título, casi mejor así. Para ellos habré ganado injustamente y eso me alegra mucho más. Por eso me gusta tanto ganar carreras del Mundial, porque sé que molesta a toda esa gente".

Es el tipo de reflexiones que nunca se esperan escuchar a dos días de la teórica proclamación. Pero, en el fondo, son comentarios que inducen a pensar que el asturiano necesita también de todo este decorado para reafirmarse a sí mismo y elevar su autoestima. Ahora le toca el turno de hablar sobre el asfalto.