Los servicios de ginecología de Lleida, bajo mínimos por falta de especialistas

Los servicios de ginecología y obstetricia en los hospitales públicos y centros de atención primaria (CAP) de Lleida están bajo mínimos por falta de especialistas. El problema es especialmente grave en las guardias en el hospital Arnau de Vilanova, porque algunos ginecólogos han renunciado a su trabajo en la sanidad pública para no verse obligados a realizar ese servicio. El Departamento de Salud ha pospuesto 300 visitas ya programadas de pacientes.

El problema arranca de una resolución que firmó la consejera de Salud, Marina Geli, el pasado 27 de junio, que obliga a los especialistas de los centros de asistencia primaria de la ciudad y del Hospital de Santa María a incorporarse al servicio de guardias del Arnau de Vilanova en casos de necesidad. La semana pasada, dos de los seis ginecólogos del programa de atención a la mujer del CAP de Prat de la Riba comunicaron al Instituto Catalán de la Salud (ICS) su renuncia por no estar de acuerdo con esta imposición. Otros tres están de baja.

Los 10 ginecólogos de plantilla del Arnau de Vilanova son insuficientes para atender los 2.700 partos que se producirán este año en el centro. Los sindicatos acusan al Departamento de Salud de dejar en cuadro la asistencia ginecológica y de obligar a muchas mujeres a acudir a la sanidad privada, una opinión que no comparte Jaume Capdevila, director médico del Arnau de Vilanova. Éste reconoció la dificultad para encontrar ginecólogos en las listas del paro y explicó que el conflicto está en vías de solución, porque se han incorporado a las guardias otros cuatro especialistas procedentes del Santa María y de la atención primaria.