Annan y Zapatero
A Kofi Annan le pareció, cuando participó el pasado marzo en Madrid en los actos conmemorativos del 11-M, una idea sugerente la Alianza de Civilizaciones propuesta por Rodríguez Zapatero en la ONU hace casi diez meses y reiterada más tarde en Argel ante la Liga Árabe. Annan ha decidido ahora fomentarla, y con tal razón se dispone a designar un grupo de expertos para que elaboren propuestas concretas de aquí a finales del año que viene. El jefe del Gobierno español tiene que sentirse satisfecho ante la aceptación en el foro de Naciones Unidas de una iniciativa suya copatrocinada por el primer ministro turco, el islamista Erdogan, y a la que se han sumado hasta la fecha una veintena de países europeos, árabes y latinoamericanos. Es un triunfo diplomático en una institución donde España debe tener más influencia.
Por su propia condición, la ONU se ve impelida a constituir grupos de sabios para que redacten "planes de acción" sobre problemas diversos. Las conclusiones suelen ser la mayoría de las veces brillantes y acertadas -en algunas ocasiones, irrealizables-, pero por desgracia se desvanecen en el mundo de las promesas incumplidas de los gobiernos. En el formato, este proyecto Zapatero-Annan es idéntico a otros que se urden en el vetusto palacio de cristal neoyorquino. Desde una óptica cínica se debería concluir que está condenado a no tener demasiado impacto; más aún cuando la influencia política de España en el seno de Naciones Unidas dista mucho de ser la que le corresponde por cuota de contribución financiera. Sin embargo, una idea como ésta, por ingenua o utópica que pueda parecer, trasciende a su autor y merecería ser objeto de atención si se quiere acabar con la lacra del terrorismo, no sólo con las muy necesarias fórmulas de cooperación policial y judicial, sino también con políticas de integración entre comunidades y de lucha contra la pobreza.
Un proyecto para construir, hasta donde sea posible, una especie de puente entre civilizaciones, dentro del respeto de los derechos humanos y la tolerancia cultural y religiosa, resulta ser una vía necesaria y muy conveniente para afrontar la amenaza del terrorismo internacional. Pero lo más sobresaliente, por evidente o retórico que suene, es que se sugiera que sea liderado por la propia ONU, un foro desprestigiado en los últimos tiempos por irresponsables políticas unilateralistas, pero que debería seguir siendo el centro exclusivo de la legalidad internacional.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
¿Tienes una suscripción de empresa? Accede aquí para contratar más cuentas.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.
Archivado En
Últimas noticias
Un policía resulta herido en una balacera desatada en el centro de Ciudad de México
Casi el 90% de la redacción de la televisión valenciana À Punt suspende la gestión de la dirección de Informativos
Los demócratas difunden nuevas fotos de Epstein con Noam Chomsky y Bill Gates
Muere una turista al ser arrastrada por una ola en la costa de Baiona mientras hacía fotos desde las rocas
Lo más visto
- Los hijos de Isak Andic negocian un acuerdo para pagar 27 millones a la pareja del empresario y cerrar el conflicto por el legado
- La población de pumas de la Patagonia se dispara gracias a una presa inesperada: los pingüinos
- Irene Escolar: “Si la gente se droga es porque encuentra en ello una anestesia que necesita. Negarlo es absurdo”
- El Supremo ordena al ex fiscal general el pago de la multa y la indemnización a la pareja de Ayuso que le impuso al condenarle
- Carlos Alcaraz y Ferrero rompen tras siete años: “Llegan tiempos de cambio para los dos”




























































