El CES apoya el "céntimo sanitario" aunque lo creen insuficiente los sindicatos

El Comité Económico y Social (CES) de la Comunidad Valenciana aprobó ayer, por unanimidad, el dictamen al anteproyecto legal por el que se modifica la ley reguladora del tramo autonómico del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF). El dictamen contó con un voto particular del grupo de los sindicatos. La Consejería de Economía remitió este anteproyecto, que busca nuevas fuentes de financiación para afrontar el crecimiento del gasto sanitario.

Pese al dictamen favorable, el comité considera que para hacer una adecuada evaluación del anteproyecto debería haber dispuesto de la información suficiente sobre el incremento del coste sanitario derivado del aumento de población en la Comunidad Valenciana. Además, advierte de que medidas como el establecimiento de un gravamen autonómico sobre las ventas minoristas de determinados hidrocarburos, "pueden afectar negativamente a la inflación". El voto particular de los sindicatos se debió a la no inclusión de algunas de sus enmiendas en las que consideran que con la aplicación de este impuesto se obtendrían unos ingresos de 60 millones de euros en un ejercicio completo, "cifras que, en absoluto suponen solución económica al problema económico sanitario ni da respuesta a la situación financiera del sistema sanitario valenciano".

Además, tanto CC OO como UGT creen que para la elaboración de una norma de estas características se debería contar con información exhaustiva del déficit real sanitario valenciano y sostienen que el gasto farmacéutico interanual de la Comunidad Valenciana se incrementó en un 7,57%, por encima de la media nacional, situada en 6,40%, "lo que es un indicador de la incapacidad de la administración sanitaria valenciana de organizar y gestionar los recursos sanitarios con la eficacia y eficiencia necesarias".