Navarra achaca los ajustes presupuestarios a la inmigración

¿Atraviesa Navarra una crisis presupuestaria? ¿Falta dinero para mantener sus actuales niveles de bienestar social? La respuesta de los políticos es no. Pero, ¿se están aplicando recortes al gasto social? El Gobierno lo niega y la oposición lo afirma. Tras varios meses de disputas dialécticas, el vicepresidente del Ejecutivo, Francisco Iribarren, asegura que no se recorta este gasto pero que el aumento de la población en un 9,4% en los últimos diez años debido a la inmigración está obligando a readaptar los servicios.

Las huelgas de profesores y facultativos de hospital, la cancelación de programas de bienestar social, recortes en las ayudas a las madres con niños menores, reducción de inversiones en escuelas y la reordenación del ciclo educativo de 0-3 años por su elevado coste son argumentos que la izquierda parlamentaria esgrime para destacar que el gabinete de Miguel Sanz, ha consolidado un recorte de gasto social.

El Gobierno lo niega. Iribarren señala que de un presupuesto para 2005 de 3.154 millones de euros el gasto comprometido a comienzos de junio era ya de 1.434 millones, algo más del 45%, con uno de los ritmos de ejecución más altos de los últimos años. Además, la recaudación de impuestos supera "con holgura" las previsiones y las arcas públicas tienen un saldo de 345 millones de euros en bancos, 114 más que en hace un año.

¿Dónde está entonces el problema? Según Iribarren, en el boom poblacional causado por la inmigración. "Con un aumento del 9,6% en 9 años todos tenemos que afrontar molestias para acoger a estas personas, que son además un colectivo que demanda muchos servicios", afirma. "Habrá que ir adaptando nuestras infraestructuras". Iribarren señala que las autorizaciones de gasto a principios de mes superaban el 50,8% del presupuesto en mejoras de escolarización, 81,7% en construcciones escolares, 83,6% en asistencia extrahospitalaria, 44,7% en hospitales, 41% en atención primaria y 50,3% en salud. "Con estas cifras es difícil hablar de retrasos", dice.

Críticas de la oposición

La oposición no está de acuerdo e insiste en que el recorte en Educación y Bienestar Social supera los diez millones de euros, mientras reprocha al Gobierno el mantenimiento de elevados niveles de gasto en obras públicas o la compra, en estas circunstancias, del 1% de Iberdrola por más de 300 millones de euros. Según Iribarren esta operación ha reportado en seis meses a Navarra -que gasta 16,47 euros por habitante y día- 18 millones. El Gobierno tiene enfrente a IU, que demanda créditos para reorientar unos presupuestos "restrictivos"; al PSN-PSOE, que le acusó de haber ejecutado sólo el 61% del presupuesto de 2004; a Aralar, que asegura que Navarra está mejor que el resto "en arreglos de iglesias y sociedades públicas opacas", y a EA y PNV, que denuncian recortes críticos para la educación y lo social.