El 'no' holandés deja la Constitución europea al borde del fracaso

Holanda votó ayer no a la Constitución europea. Una vez terminado el escrutinio, las papeletas negativas alcanzaban el 61,6%. La participación fue casi del 63%, muy superior a la de las últimas elecciones europeas. Es el segundo varapalo al proyecto de tratado, que el domingo sufrió un gran castigo en las urnas francesas. Sólo el 38,4% de los holandeses dijo sí a la Constitución europea. El rechazo en Francia y Holanda, dos de los seis países fundadores de la UE, abrió de inmediato el debate sobre la suspensión del proceso de ratificación. "La Constitución sufre ya una muerte cerebral, pero nadie quiere desenchufarla", dijo un diplomático francés.

El presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durão Barroso, pidió anoche que ningún país tome decisiones unilaterales antes de la cumbre de jefes de Estado y de Gobierno de los Veinticinco de los próximos 16 y 17 de junio. Pero el Gobierno británico da ya por muerto el proyecto constitucional, según diversas fuentes, y espera sólo un "tiempo de reflexión" antes de anunciar su decisión de no convocar el referéndum.

El referéndum en Holanda movilizó una gran participación. Frente al 39% que votó en las elecciones europeas de junio, el 62% del censo acudió ayer a las urnas. Y el triunfo del no fue aún más intenso que el que habían previsto los sondeos, porque casi el 62% optó por el no, según los datos provisionales.

"Estoy decepcionado, no estoy contento con el resultado porque el Gabinete abogaba por el sí", aseguró el primer ministro holandés, Jan Peter Balkenende, democristiano. "Los ciudadanos nos han dado una señal inequívoca y la respetaremos". El líder de la Lista Pim Fortuyn, contrario al tratado, declaró su satisfacción: "El pueblo holandés no se ha dejado asustar. Ha ganado la democracia", dijo Mat Herben.

Desde Bruselas, Barroso aseguró: "Necesitamos saber adónde vamos. Pido a los Estados miembros que se abstengan de tomar decisiones que podrían hacer más difícil el necesario consenso. No sería inteligente que, antes de la cumbre, los Estados miembros tomen decisiones que dificulten un acuerdo entre todos". El no de Francia y Holanda suma nuevos nubarrones en el horizonte. Las últimas encuestas en Luxemburgo recogen un descenso del apoyo a la Constitución desde el 79% en otoño al 59% actual.