Aclaraciones de Greenpeace

Algunas de las críticas en contra de las reivindicaciones de Greenpeace en Huelva han sido en el sentido de tratar de relacionar a la Mesa de la Ría con intereses urbanísticos. Nuestras reuniones con ellos han demostrado que esto no es cierto. De todas maneras, Greenpeace simplemente ha colaborado con este importante movimiento ciudadano (más de 30 colectivos) para denunciar una situación de contaminación que dura ya 40 años. Por supuesto, como es bien sabido, nuestra organización lucha desde hace años contra la destrucción de la costa española motivada, en gran medida, por la especulación inmobiliaria. Durante la estancia del Arctic Sunrise en Huelva, Greenpeace no ha mencionado en ningún momento, que para solucionar el problema de contaminación de Huelva, fuera necesario el cierre de las plantas químicas o el despido de los trabajadores. Al contrario, siempre hemos antepuesto el bienestar y salud de las personas a cualquier otra premisa, incluida la de los trabajadores. Es probable que la contaminación de la Ría de Huelva haya disminuido en los últimos años, pero esto no implica que la situación sea buena o mínimamente aceptable. Muy al contrario, y los informes oficiales así lo ponen de manifiesto (CSIC, SAS, Sociedad Española de Neumología), los onubenses viven en un entorno insalubre con sus suelos, aire y aguas contaminados. Greenpeace sólo ha pretendido mostrar tanto a los vecinos de Huelva como al resto del Estado español un problema que es necesario solucionar. Es urgente detener las agresiones ambientales que se están produciendo en Huelva, además de emprender la descontaminación de la ría. De esta forma la ciudad podría recuperar un entorno, que sin lugar a dudas, convertirían a Huelva en una de las capitales de España con un medio natural más privilegiado.