Melilla aumenta las ayudas para la instalación de empresas

El Gobierno de Melilla ha aprobado una nueva partida económica, a través de la Sociedad Pública de Promoción Económica de Melilla (Promesa), para apoyar la realización de cursos de formación profesional y ayudar a la inversión, con el fin de que Melilla sea cada vez más atractiva para las pequeñas y grandes empresas peninsulares.

Ésta podría ser una de las vías de revitalización para una ciudad hasta ahora demasiado dependiente del comercio con Marruecos, un país por otra parte que tiene señalado su desarme arancelario para el año 2010.

Sin embargo, pocos empresarios de fuera de Melilla conocen estas ventajas. "Es una oportunidad desaprovechada por parte de las empresas europeas y españolas más concretamente", señala el presidente de la Sociedad Pública de Promoción Económica de Melilla, José María López Bueno. El responsable de esta sociedad pública se refiere sobre todo a "empresas como las de telemarketing, Internet o comercio electrónico; negocios en los que la ubicación física de la empresa no es determinante para el cliente pero, en el caso de Melilla, sí lo es para la empresa al mejorar su posición competitiva".

Aunque los distintos regímenes de ayudas a la inversión existentes en Melilla permiten llegar a subvenciones a fondo perdido de hasta el 55% del total de la inversión, para Juan José Imbroda, presidente de la Ciudad Autónoma de Melilla, esto no basta para explicar el aumento de las inversiones: "Melilla es un destino privilegiado de inversión por sus ventajas fiscales, su especial régimen arancelario y su localización estratégica".

En Melilla el impuesto de sociedad y el IRPF tienen una bonificación del 50%. Además, en Melilla no se aplica IVA, situándose el tipo máximo de su impuesto local equivalente (el IPSI) en el 10%. Otro aliciente más para que sigan aumentando las inversiones, según señala Imbroda, es su "especial régimen arancelario, que permite que aquellos productos que reciban una transformación mínima tengan libre acceso a los mercados comunitarios sin aranceles ni contingentes".