Partidos y sindicatos censuran a Iztueta y piden un mediador para los interinos

El conflicto de los profesores interinos que se han encerrado en un instituto de Bilbao por perder la estabilidad al no saber euskera se aleja cada día más de la solución. Las últimas declaraciones de la consejera de Educación, Anjeles Iztueta, rechazando cualquier salida que no pase porque los docentes aprendan la lengua vasca si quieren seguir disfrutando de estabilidad, ha elevado la tensión.

PP, PSE, Comisiones Obreras (sindicato mayoritario entre los docentes de la red pública) y UGT pidieron ayer al lehendakari Juan José Ibarretxe que cese a la consejera y nombre un mediador para resolver el conflicto. Tanto los partidos como las centrales consideran que Iztueta ha quedado "inhabilitada" para dar una salida satisfactoria a un problema que se ha agravado tras sus afirmaciones. En sus críticas a los 157 interinos sin perfil de euskera que han perdido la estabilidad, la consejera destacó que la sociedad se ha gastado 11,5 millones de euros en su proceso de euskaldunización y los docentes no han cumplido con su compromiso. Iztueta remató su intervención con esta sentencia: "O son incapaces de aprender o no quieren convertirse en bilingües".

La responsable de Educación del PSE, Isabel Celaá, apeló a Ibarretxe para efectuar "las rectificaciones oportunas" en la política educativa desarrollada a lo largo de la legislatura por Iztueta, ya que sólo ha creado conflictos y ha "traicionado" los principios del Pacto Escolar en el que se inspira el sistema educativo vasco. Javier Nogales, responsable de la sección de enseñanza de CC OO, acusó a Itzueta de provocar el enfrentamiento y reclamó un mediador.

En medio de la tormenta, el sindicato LAB salió en defensa de la consejera y coincidió con ella en que la única salida para los interinos pasa adquirir el perfil exigido.