"Espero que juegues mal pero metas un gol"

La voz aflautada y el discurso plano de Alessandro del Piero es atendido con gran reverencia por la prensa italiana. Cuando el capitán del Juventus abrió la boca ayer en la conferencia de prensa previa al partido contra el Madrid, la piña de periodistas transalpinos hizo un silencio respetuoso tal que si hablara la Sibila. Hubo alguno que hizo ademán de arrodillarse. Estaban ante un chico encorvado que parece pedir perdón por todo. Un tipo al que en el Piamonte se considera especie protegida. Modelo social. Artista. "Su percepción ante el partido es positiva?", le preguntaron.

-Sí, dijo Del Piero, con un timbre de Pulgarcito. A su lado, Fabio Capello, compartía mesa en la conferencia de prensa y resoplaba impaciente.

-¿Qué cree que le faltó en el partido de ida en Madrid? ¿Qué espera del partido a nivel personal? -insistió otro reportero.

-Jugar bien y hacer gol -respondió la vocecilla, antes de que Capello le interrumpiera con una especie de ladrido socarrón-. No, yo espero que juegues mal y hagas gol -proclamó el técnico, mirando al delantero con una sonrisa de fauno-. No me interesa cómo juegues. ¡No me interesa cómo juegues!.

-Eco [claro] -susurró Del Piero, con ojos asustados, bajando la cabeza y aplanando las cejas-. Hacer goles y jugar bien son cosas distintas -explicó Capello. Y todos los periodistas presentes en la sala tomaron nota como si oyesen el oráculo.