Miles de agricultores exigen su derecho a vivir del campo

La meteorología acompañó ayer al campo valenciano por primera vez en meses. Miles de agricultores y ganaderos recorrieron por la tarde el centro de la ciudad de Valencia -50.000 según la organización y 12.000 en cifras de la Policía - para protestar por la crisis de rentabilidad que sufre el sector y reclamar a las tres administraciones las políticas necesarias para garantizar su derecho a seguir viviendo de la agricultura. El sector repitió una y otra vez que vive la peor crisis de la historia y que sufre "una reconversión salvaje, brutal y silenciosa", en palabras de Joan Brusca, secretario general de la Unió de Llauradors-COAG, ante la que los distintos gobiernos no dan soluciones.

La polémica política precedió a la manifestación. El Consell asumió el viernes la protesta como una marcha contra el Gobierno y reiteró la presencia de Juan Cotino, consejero de Agricultura, en el acto. Ayer, Joan Ignasi Pla, secretario general de los socialistas valencianos, consideró un acto de "desvergüenza política" la posible presencia de Cotino, y pidió su dimisión. "Cotino va a una manifestación contra él mismo", dijo Pla tras recordar que la marcha se produce tras diez años de abandono de los agricultores. Las declaraciones fueron contestadas desde el PP, que animó a Pla a dimitir y a pedir también la dimisión de la ministra de Agricultura, Elena Espinosa por "decencia política".

Pese a la polémica, Cotino acudió a la manifestación. Su presencia al inicio desató protestas entre algunos agricultores. Cotino, en cualquier caso, aseguró que asume las reivindicaciones que son de su competencia y pidió al Gobierno la misma celeridad en conceder ayudas al campo valenciano ante las heladas que la que ha tenido para la crisis del Carmel en Barcelona.

En la manifestación también participó el presidente de la diputación de Valencia, Fernando Giner. El portavoz socialista de Agricultura en las Cortes Valencianas, Toni Lozano, el presidente del Seiasa (Sociedad Estatal de Infraestructuras Agrarias) de la meseta sur, Francisco Rodríguez, la diputada de EU, Dolors Pérez o Enric Morera, secretario general del Bloc, también estuvieron presentes. Por parte de los sindicatos, una representación de la ejecutiva de CC OO-PV encabezada por su secretario general, Joan Sifre, y de UGT-PV, liderada por Rafael Recuenco, se sumaron a una marcha que transcurrió sin incidentes y bajo el lema Por el futuro de nuestro campo.

El acto terminó en la plaza de América, donde distintos responsables agrarios desgranaron críticas y reivindicaciones. "El campo dice basta", afirmó Enrique Blasco, en nombre de las cooperativas agrícolas. "Si los responsables no aportan soluciones, nos encontrarán en el camino", añadió.

Cristóbal Aguado, presidente de AVA recordó que el campo es la "base del sector agroalimentario, que representa casi el 20% de toda la riqueza" valenciana. Y Joan Brusca recordó que la Administración ayuda a otros sectores económicos y "abandona el campo" para urbanizar el suelo. El dirigente agrario propuso que ante la falta de políticas se cierre la Consejería de Agricultura y se reparta su presupuesto entre los agricultores. Los distintos oradores recordaron la crisis de precios, criticaron los "abusos" de las grandes cadenas de distribución comercial, denunciaron lo que consideran una falta de apuesta política por un sector que ayer se mostró cansado de dar más de lo que recibe y dispuesto a luchar contra su desaparición.