Mas convence a Convergència de que apoye la Constitución europea

Artur Mas se salió con la suya ayer pero con menor apoyo del esperado. El consejo nacional de Convergència Democràtica resolvió, con un 75% de los votos, apoyar la Constitución europea en el referéndum del próximo 20 de febrero. Los convergentes culminaron así un espectacular viraje que arrancó en su congreso de julio cuando, inesperadamente, prosperó una enmienda en contra del Tratado europeo.

Consciente de que la decisión adoptada no despierta una adhesión unánime entre las bases del partido, Mas pidió ayer un especial cuidado en no mostrar "ninguna hostilidad" hacia los partidarios del no en las filas nacionalistas. No en vano, fuentes de la dirección de CDC interpretan que el resultado obtenido se debió al "trasvase" de votos de personas contrarias en un principio al texto constitucional y que ayer optaron por abstenerse (un 20% de los votos emitidos). Entre los abstencionistas figuraron las juventudes del partido, contrarias hasta ayer al tratado.

La postura favorable a la Constitución Europea adoptada por Convergència supone el final de un rocambolesco proceso -Mas aseguró posteriormente que fue pura "estrategia"- que se inició hace medio año, cuando en el congreso ordinario de julio prosperó, contra todo pronóstico y para desespero de la dirección, una enmienda contra el tratado de la UE.

Frente a tal situación, la dirección de CDC tuvo que intervenir, acordando que la decisión final acerca del sentido del voto se tomaría en un congreso extraordinario. Dicho cónclave sirvió para que Convergència condicionara el sí al texto constitucional al "reconocimiento institucional y lingüístico de Cataluña en la UE", emplazando la decisión final a un consejo nacional, celebrado ayer.

25 intervenciones

A principios de este mes, Mas declaró estar a favor de la Constitución Europea, ya que, según él, el Gobierno había cumplido las exigencias planteadas por los convergentes. Pero ayer, Mas tuvo que escuchar más de 25 intervenciones criticando la gestión de CDC en todo este proceso.

El definitivo apoyo de CDC a la Constitución Europea asegura una posición común de CiU en el referéndum previsto para el 20 de febrero. Una coincidencia en medio de una semana en la que los dos socios de la federación nacionalista han discrepado casi a diario -en torno a la reforma legal catalana que permitirá la adopción a las parejas homosexuales, sobre la creación de un comité de sabios propuesto por Pasqual Maragall para reducir el déficit de los medios de comunicación públicos y, por último, acerca del Plan Ibarretxe-.

Sin embargo, el presidente del consejo nacional de Unió, Ramon Espadaler, negó que las relaciones en CiU atraviesen un bache. Pese a ello, Unió decidió ayer, pese al criterio en contra de sus socios, presentar una enmienda a la totalidad contra la ley de parejas homosexuales.

El consejo nacional de Convergència también decidió, por primera vez en la historia de esta formación política, su adscripción a un partido europeo, en concreto al Partido Liberal Demócrata Reformista. Unió está, como el PP, en la Internacional Demócrata-Cristiana.