Centenares de vecinos acompañan a las familias en el funeral de las víctimas

Las tres personas fallecidas como consecuencia de la explosión de gas del pasado miércoles en Getafe fueron incineradas ayer. A los dos actos celebrados en el tanatorio de la localidad acudieron unos 500 vecinos y representantes de la corporación local, con su alcalde, el socialista Pedro Castro, a la cabeza, para expresar su solidaridad con los familiares de las tres víctimas mortales del suceso.

Por la mañana se celebró una ceremonia fúnebre en memoria de Raquel Romero y su hija de cuatro meses, Lucía. La madre falleció poco después de la explosión, en la madrugada del jueves, mientras que la pequeña fue hospitalizada y murió en la madrugada de ayer por la gravedad de sus lesiones.

A las siete de la tarde se celebró en el mismo tanatorio la incineración de María del Carmen Sánchez, de 35 años, que falleció el jueves por la mañana. Durante los responsos de las tres fallecidas se pudo apreciar la conmoción que han causado sus muertes entre sus familiares.

Aún quedan cinco heridos graves en los hospitales Doce de Octubre, La Paz, Severo Ochoa, de Leganés, y el de Getafe. El portavoz socialista en la Asamblea, Rafael Simancas, visitó ayer a los que están ingresados en este último. Se trata de Jorge Rovira, de 36 años, y Diana Cantalejo, de 29.