Pesic señala a Rivera como el culpable de su salida del Barça

De manera elegante, Svetislav Pesic se despidió ayer en el Palau Blaugrana como entrenador del Barcelona de baloncesto, equipo al que consideró como "el mejor del mundo". Pesic, que tuvo palabras de agradedecimiento para el presidente, Joan Laporta, sólo mostró su disconformidad con Valero Rivera, director general de las secciones. "No querría polemizar con las personas que no entienden este deporte, ni la problemática del baloncesto moderno y que, además, no utilizan la verdad", explicó. "No he podido aceptar que alguien que no conoce el baloncesto decida sobre mí, mi profesión, mi familia, mi futuro y sobre el equipo del que yo era responsable".

El técnico serbio, que no aclaró si había dimitido o había sido destituido -"no me he ido solo, pero tampoco me han echado"- insistió en que no le quedaba otra salida: "Luché hasta el final por mi dignidad y por la del baloncesto, pero lo más importante es el equipo y no quería destruir su ambiente. Me sabe mal porque a mis 55 años estaba al comienzo de mi trabajo y me hubiera gustado retirarme en el club, con el que he ganado cuatro títulos". Pesic, sustituido por Joan Montes, abandonó la sala al grito de "¡Visca el Barca!" y "¡Visca Catalunya!".